Vendía huevos en los barrios de Comodoro cuando era chica y hoy tiene su propia pastelería

Dicen que lo que se vive de chico es una marca imborrable en la vida adulta. Y Paula lo sabe mejor que nadie. Cuando era chica junto a sus hermanos -y bajo la atenta mirada de sus padres-caminaban por los barrios de Comodoro vendiendo huevos.

Así pasó su infancia y adolescencia. Huevos. Especies. Turrones. Todo era bienvenido para ayudar a la economía familiar. Con el tiempo la suerte cambió y su papá ingresó a la industria del petróleo lo que significó un gran alivio. Para entonces el legado del trabajo y sacrificio ya habían hecho mella en Paula.

El gusto por la cocina siempre estuvo presente y en 2020 –durante la pandemia- decidió comenzar a vender productos de pastelería elaborados por ella. ¡Y fue un éxito!.

Agradece el apoyo de sus hermanos, su mamá que estuvo desde el comienzo del proyecto y Noelia quien tiene a cargo el manejo de las redes sociales.

En Luchadores la historia de Paula que cumplió su sueño e inauguro su propia pastelería.