El Gobierno Nacional había anticipado que el mes de febrero llegaría con aumentos en las tarifas de energía y luz, a partir de una decisión de dejar de subsidiar los servicios y solo hacerlo con los sectores más vulnerables. Sin embargo, en las últimas horas se decidió postergar los aumentos del que estaban previstos para febrero.

La decisión de dar marcha atrás se dio pese a que el equipo técnico de Energía ya tenía preparados los nuevos cuadros tarifarios, no obstante, hubo una decisión política de diferirlos un mes más, es decir, para marzo.

El gobierno si decidió avanzar en febrero con un aumento en las tarifas de energía.  Y se espera que en los próximos días la Secretaría de Energía publique los nuevos precios de generación que se reflejarán en el valor final de las boletas.

El valor de la energía será más caro desde febrero.

El Gobierno indicó que las boletas de electricidad reciben en promedio un 55% de subsidios, mientras que las de gas, un 82,5%. Se espera que en las próximas horas la Secretaría de Energía convoque a una nueva audiencia pública para debatir el nuevo esquema de subsidios.

El plan del Gobierno - según publica La Nación - es reemplazar la segmentación actual, que divide en tercios a los usuarios según su nivel de ingreso, por la implementación de una canasta energética básica, que cubra las necesidades mínimas de consumo de gas y electricidad, y que variará según el decil poblacional y la zona geográfica en la que se resida.

La intención es que el Estado subsidie a los hogares en los que el costo de la canasta básica exceda el 10% de sus niveles de ingresos (5% por gas y 5% por electricidad). Para ello, el Gobierno deberá recopilar el nivel de ingreso familiar de cada hogar, una medida que es difícil de implementar, como le sucedió a la administración anterior.

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