Anticipo de elecciones en Trelew: una larga transición que puede ser un peligroso arma de doble filo

El municipio de Trelew irá a las urnas el 16 de abril próximo y abrirá el calendario electoral de la Provincia de Chubut. Una experiencia que no tiene demasiados antecedentes y que es una apuesta política de riesgo, una peligrosa jugada llevada adelante por el proyecto que conduce el intendente Adrián Maderna.

En horas en que distintos lugares del centro y de la periferia se están colmando de carteles, pasacalles y distintas publicidades y en las que los precandidatos empiezan a pisar el acelerador de la campaña con recorridas por los barrios y reuniones con diversos sectores de la ciudad, aparece una pregunta que a esta altura nadie tiene respuesta: ¿qué pasará durante la larga transición que se vivirá hasta el 10 de diciembre cuando deban asumir las nuevas autoridades?

Serán 8 de meses de espera para quien resulte electo, algo así como 240 días. Lo que en la vida real y en la política equivale a una eternidad.

Haciendo un poco de futurismo se puede especular que Trelew podría enfrentarse a dos escenarios muy diferentes entre sí. Uno sería en el caso de la conducción electa provenga del actual oficialismo, es decir una especie de continuidad del intendente Adrián Maderna; y un panorama totalmente diferente se vería si el que se impone en las urnas el 16 de abril es uno de los candidatos de la oposición.

La diferencia básicamente está dada en que, de ganar un candidato cercano al actual jefe comunal, es de esperar que al otro día se sume a su gabinete y qué incluso pueda hasta cogestionar acciones. Este podría ser el caso, por ejemplo, de Leila Lloyd Jones, la actual diputada provincial y ex presidente del Concejo Deliberante de Trelew que goza del explícito apoyo del intendente Adrián Maderna.

No sería ilógico que la legisladora en caso de resultar electa comparta actividades junto al actual intendente e incluso lo acompañe en determinadas gestiones.

Pero si el resultado de la elección del 16 de abril coloca a un opositor en el sillón de intendente, ¿cómo gobernará durante 8 meses el actual jefe comunal sin que ello condicione a la futura gestión?

DUDAS

Muchas son las dudas que se abren y que se potencian aún más en un contexto de alta inflación. Por ejemplo, ¿cómo se resolverán las negociaciones paritarias con los gremios municipales? ¿Con quién se van a sentar a discutir los dirigentes sindicales? ¿Con las autoridades actuales, con los que fueron electos o con ambas partes? Será difícil de todas formas acordar en ese marco.

Otros temas no menores tienen que ver con que pasará con la culminación de ciertas obras, con el arreglo de calles y espacios públicos que tanto demandan a diario los vecinos. Con los compromisos que asuma la actual gestión del intendente Adrián Maderna durante esos 8 meses de espera para quien lo suceda y lo que es más preocupante: ¿quién será el que tome decisiones trascendentales en ese período? ¿Adrián Maderna o el intendente electo?

Y en ese contexto también aparece la incertidumbre que tendrán por ejemplo los proveedores municipales, quienes generalmente y como sucede en todo el Estado producto de la burocracia deben esperar meses para cobrar por los servicios prestados.

Se necesitará encarar semejante transición con seriedad. La ciudad vive una crisis sin precedentes y no está para sufrir un parate de 8 meses; es demasiado tiempo para debatir quien está legitimado para dar respuestas a los vecinos que las necesitan ahora.

RELACIÓN CON LA PROVINCIA

Y también hay otro interrogante trascendental. ¿El gobierno provincial comenzará a hablar con quien resulte electo a 8 meses antes de asumir? ¿Qué pasará si la intendenta electa es Leila Lloyd Jones que ya dijo estar en la vereda de enfrente del gobernador Mariano Arcioni? ¿Hay en ese contexto de enfrentamiento personal posibilidad de diálogo?

¿Y si el elegido nuevo intendente de Trelew es de la oposición, las autoridades provinciales que, hasta ahora, seguirán hasta diciembre, comenzarán a trabajar junto a quienes todavía no asumieron y lo harán justo el día cuando termine la actual gestión de gobierno en Chubut?

A todo esto, hay que sumarle un escenario similar que se dará con el Gobierno Nacional que culmina su mandato el 10 de diciembre. A lo que hay que a su vez hay que agregarle otro ingrediente: la alta probabilidad que se produzca un cambio de rumbo en las políticas públicas si como lo indican la mayoría de las encuestas en las elecciones de octubre se impone la oposición.

EL NUEVO CONCEJO DELIBERANTE

Por otro lado, también se abren interrogantes en cómo quedará conformado el futuro Concejo Deliberante de la ciudad luego de la elección del 16 de abril. Los futuros ediles también deberán esperar 8 meses para asumir en sus bancas y comenzar a trabajar en los proyectos que prometieron durante la campaña.

En lo legislativo también el abanico de preguntas es amplio. Por ejemplo ¿qué pasaría si en la categoría concejales triunfa un partido diferente al del intendente electo? ¿Las conversaciones entre ambos sectores deberían iniciarse inmediatamente o por diferencias lógicas de miradas esperan sentarse recién el 10 de diciembre?

Suceda lo que suceda y que se de cualquiera de los escenarios esperados, los dirigentes políticos de Trelew, sean del espacio del que provengan, deberán estar a la altura de las circunstancias. Una espera de 240 días es demasiado tiempo y la ciudad no está en condiciones de soportar semejante cantidad de días para que el andamiaje administrativo y político se ponga en marcha recién en diciembre.

Se necesitan respuestas y soluciones rápidas, y sea cual fuere el resultado de las urnas el próximo 16 de abril, los números que arroje la contienda electoral podrán a los dirigentes políticos frente a una prueba de fuego: evitar que la larga transición ponga en jaque a Trelew durante 8 meses.