Mauricio Macri, presidente de la Nación y fanático de Boca, no ocultó su felicidad por la derrota de River en la final de la Copa Libertadores ante Flamengo, el sábado por 2-1 en Lima.
"Fue un fin de semana especial", expresó el mandatario, consultado al respecto por Radio La Red, en medio de la inauguración de una nueva estación del tren Belgrano Cargas en Pompeya.
Antes, había mencionado a Ramón Díaz, con quien mantuvo grandes duelos dialécticos mientras era dirigente xeneize y el Pelado dirigía al Millonario en los '90, para destacar avances en la Capital Federal a pocos días de dejar su cargo.
"Como decía hace unos meses mi amigo, que está viajando, yendo y viniendo porque trabaja mucho en el exterior, la transformación que ha tenido la Ciudad de Buenos Aires estos años es increíble", comentó.