Cómo disfrutar de la comida navideña de una manera saludable y sin malestares físicos

La nutricionista Noelia Redondo, brindó algunas recomendaciones para no perder el control en las comidas durante esta Navidad y Año Nuevo. 

“El mundo no se acaba el 24 de diciembre, tenemos otras ocasiones para comer esa comida que nos gusta. Hay que hacer las cosas con consciencia”, aclaró la nutricionista. 

Y agregó que “si sabemos que el 31 y el 1 vamos a volver a repetir lo mismo, que el resto de las comidas del día la hagamos bien. De todo lo disponible que hay en la mesa, realmente qué queremos comer”, consideró.

En ese marco, enumeró: “Tenés bitel toné, fiambre alemán, pionono y tomate relleno. Si de todo eso, sólo te gusta el bitel toné, no hace falta que comas el resto de las cosas simplemente porque estén ahí”, señaló. 

Entonces, “cubrí tu porción, lo que vos quieras comer, con la comida que más te guste. Porque después vas a tener postre y después vas a tener la mesa dulce”, explicó. 

Mesa dulce

Para el turno de la mesa dulce, la licenciada sugirió “agarrar un platito, separarte un puñado de cada cosa que quieras probar y esa va a ser tu porción. Es una forma de ser consciente de lo que uno come sin excluirte de lo que come el resto”, destacó. 

“Hay que pensar que no hay nada prohibido, porque ese es un concepto muy erróneo y lamentablemente tenemos muy arraigado el ‘permitido’ que implica un prohibido", aclaró. 

“No es el permitido de un atracón con todo lo que tengo en la mesa. Es simplemente permitirme disfrutar de la comida de ese momento"

Después otra cosa, otra sugerencia es “comer lento, masticar bien, disfrutar de cada bocado. Primero, para que tu cerebro se entere que comiste, y segundo para disfrutarlo como corresponde. Porque cuando uno come apurado y termina tragando, en realidad no le terminás sintiendo el sabor a nada", resaltó.

¿Qué comida navideña recomendarías? 

Lo que uno puede tratar de hacer es, “esas preparaciones que habitualmente comemos, hacerlas lo más liviano que se pueda”, advirtió. 

Entonces, por ejemplo, “un tomate relleno, si le agregamos arroz, atún y queso blanco, es una cosa. Ahora, si lo rellenamos con ensalada rusa, con mucha mayonesa, es otra. Está bueno incorporar vegetales en todas las comidas. Busquemos la forma de que ese relleno no sea tan grasoso”, aconsejó.

El lechón: ¿frío o caliente?

“En realidad termina siendo lo mismo y depende del organismo de cada uno, porque la cantidad de grasa que tiene es la misma, salvo en el caliente que se licúa un poco más y puede quedar un poco más de grasa en la fuente que en el plato o en el tenedor al camino a la boca”. Y agregó, “las carnes en general hay que tratar de comerlas sin grasa”, concluyó.