¿Cómo afecta el dólar agro a la economía argentina?
Alberto Fernández prometió disminuir las ganancias de los bancos en concepto de LELIQ, pero el gasto en intereses sigue en aumento. Ese número supera a las jubilaciones en la primera parte del año, según IDESA,
En medio del período inflacionario que atraviesa el país, agravado por el último dato de 7,7% en marzo, el instituto IDESA advirtió que en la primera parte del año se gastó más en intereses destinados a Letras de Interés del Banco Central (LELIQ) que en jubilaciones.
El presidente Alberto Fernández prometió en 2019 que los haberes aumentarían un 20% sólo con disminuir las ganancias de los bancos en este concepto.
La medida marcada como detonante de este resultado, según el informe del organismo, fue la implementación del “dólar agro” para el sector sojero y aquellos vinculados a las economías regionales.
La instrumentación de esta herramienta, también conocida como dólar-soja 3, “acelerará la emisión monetaria, la cual el Banco Central tratará de absorber aumentando la emisión de LELIQ.”
El tipo de cambio diferencial se presenta como ventana de oportunidad para liquidar y recibir $300 por dólar, en vez de $210, la cotización utilizada para comercializar. Sin embargo, el esquema, motivado para engrosar las escuálidas reservas del BCRA, “produce un cúmulo de graves distorsiones”, entienden desde IDESA.
La contrapartida de esta medida excepcional -que ya va por su edición número tres- tiene dos patas: por un lado, no desestimula la sobredemanda de dólares que provoca la baja cotización del dólar oficial.
La segunda preocupación, se repite por tercera vez: el Estado debe compensa la diferencia entre vender dólares a $210 y adquirirlos a $300. Ese bache de $90 se cubre con emisión, resaltan con preocupación en IDESA.
Para evitar el impacto inflacionario del exceso monetario, el BCRA “induce a los bancos a suscribir LELIQ con los depósitos de sus clientes”. Las LELIQ son una herramienta de política monetaria. El BCRA vende estos títulos de deuda a los bancos, y al vencimiento se aplica una tasa de interés, que luego es tomada de referencia para el mercado para fijar otras tasas, como la de los plazos fijos o préstamos. El objetivo es absorber dinero de la economía y morigerar la inflación, motorizada por la emisión.
Este instrumento, nacido en 2018 durante el macrismo con Federico Sturzenegger en el BCRA, genera ganancias exorbitantes para los bancos.
Tal es así, que en 2022 el stock de LELIQ aumentó 134%, por encima de la inflación, según Fernando R. Marengo, economista de la asesora financiera Black Toro.
Sin embargo, el dato que le otorga mayor dimensión a los rendimientos del sector financiero, está atravesado por un componente social y lo proporciona IDESA: al primer trimestre de 2023, la erogación en jubilaciones fue de $660 mil millones promedio mensual, mientras que el pago de intereses de las LELIQ fue de $700 mil millones.
Las ganancias generadas por esta herramienta, “pasaron a ser el principal gasto del Estado nacional”, según el organismo, liderado por Jorge Colina.
En junio de 2019, en medio de su precandidatura a la presidencia, Alberto Fernández aseguró que las jubilaciones aumentarían un 20% (lo perdido durante la gestión macrista) dejando de pagar los intereses de las LELIQ.
En aquel entonces, se les retribuía 60 puntos de interés a los bancos. Tras la tensión que generaron sus dichos, días después ratificó su promesa de campaña: “Entre los bancos y los jubilados me quedo con los jubilados, me importa nada el resto. Por año pagamos de intereses en LELIQ un presupuesto de la Provincia de Buenos Aires, ¿les parece razonable?", se preguntó en un acto electoral en el partido bonaerense de La Matanza.
Actualmente, la tasa de interés pagada a las instituciones financieras es de 78% y, según el portal Chequeado, en 2022 se registró una caída interanual de alrededor del 12% real de los haberes. A su vez, el nivel de inflación y la merma en la actividad, genera una disminución en los niveles de depósitos y créditos al sector privado tal que a los bancos les resulta mejor opción endeudarse con el sector público, a través de las ganancias que aseguran las LELIQ o bonos del Tesoro Nacional.