Comienza el año legislativo, y la Cámara de Diputados promete convertirse en un campo de batalla

RAWSON (ESPECIAL PARA ADNSUR / Por Pablo Vernazza) El kirchnerismo entró en todo el país en la fase de “resistencia”, y la Cámara de Diputados de Chubut no es la excepción. Ideológicamente al bloque del FPV se le facilita todo, porque sus enemigos a nivel nacional y provincial se unieron: Macri y Das Neves son ahora la nueva alianza de gobierno, y ambos buscan sacar del mapa todo vestigio de la herencia K. Por ello, ante los intendentes que suelen ser disciplinados con obras y ayuda económica, y mientras los ex funcionarios con Buzzi a la cabeza, desfilan por las oficinas judiciales, los legisladores de la mayoría buscarán hacerse fuertes en la trinchera de un Poder Legislativo que puede convertirse en un dolor de cabeza para el dasnevismo. Claro que para eso deben mantenerse unidos y no perder el número mágico de 16 que les dio la Constitución, y ese será su principal desafío.

La visita del presidente Mauricio Macri el pasado jueves para la apertura de sesiones, además de demostrar el apoyo del gobierno nacional a la gestión de Das Neves, dejó dos cuestiones a resaltar dentro del ámbito legislativo: lo primero es la bronca nada disimulada del bloque de su partido, Cambiemos. Los tres diputados Conde, Pagliaroni y Caminoa, se quedaron con el saber “amargo” de no poder tener un breve encuentro al menos de cinco minutos con el mandatario nacional. Lo consideran un “desaire”, y para colmo deben soportar que el candidato que apoyaron en la campaña, ahora le dé total respaldo a  Das Neves, enemigo histórico del radicalismo.

Los diputados junto a la dirigencia de la UCR y el PRO, querían plantearle al Presidente o al menos al ministro Rogelio Frigerio, que sería un error y una afrenta dejar que el dasnevismo designe la mayoría de las personas que se harán cargo de la representación provincial de los organismos nacionales. Pero ante el pedido de una breve entrevista, se encontraron con una negativa rotunda. Ahora protestan ante quienes quieran escucharlos, que están “desencantados” con el gobierno de su color político.

La otra cuestión para comentar de la visita presidencial del jueves, es que en el FPV, además de la movida de los pingüinos y los carteles en las bancas (similar a lo ocurrido en el Congreso), el diputado Javier Touriñán se coló en el comité de bienvenida y al saludar a Macri, le entregó una carpeta con tres reclamos: la obra del aeropuerto para Comodoro, la necesidad de modificar el impuesto a las ganancias, y el incumplimiento de las operadoras al acuerdo petrolero de paz social. Dicen que el Jefe de Estado había empezado a mirarla, pero rápidamente le fue arrebatada de las manos por la gente de Ceremonial de la provincia, y se desconoce su paradero.

Fue sin dudas una visita histórica, ya que si bien Néstor y Cristina Kirchner estuvieron en la Legislatura en  2007 para el acto de asunción de Das Neves en su segundo mandato, nunca un Presidente de la Nación había concurrido para una sesión inaugural. Pero según los voceros de las bancadas opositoras, el discurso de Das Neves no les dejó la sensación de tiempos de cambio y de diálogo, sino que por el contrario, entienden que endurecerá su postura, algo que ya observan en el recorte presupuestario para gastos de bloque y asesores.

Por ello, después de un verano agitado a causa de la polémica por la ley de emergencia, la sesión del martes será la primera muestra de lo que se viene. Será la continuación del primer round que comenzó en la sesión preparatoria, en torno a la vicepresidencia segunda. La votación por el diputado que ocupará ese lugar quedó pendiente y es el primer asunto a tratar. El FPV se niega a acompañar la propuesta del nombre de Adrián López que le corresponde hacer a Chubut Somos Todos como primera minoría. Como se cree que el dasnevismo no modificará esta postulación, el bloque de la mayoría busca convencer a Cambiemos de que haga su propuesta.

Pero a pesar de la buena voluntad expresada en estos días por la diputada cordillerana Jaqueline Caminoa para tomar ese lugar, sus compañeros Conde y Pagliaroni aún dudan de la conveniencia de quedar presos de la interna de los bloques peronistas, y no tienen una definición tomada.

Si en Cambiemos llegaran a rechazar el ofrecimiento, y el Chusoto no cambia de idea, lo más probable es que el FPV ponga también al vicepresidente segundo, cargo que es el  cuarto lugar en la línea sucesoria de la provincia y además integra el Tribunal Electoral Provincial. Será la declaración definitiva de la guerra al gobierno, lo que el dasnevista Jerónimo García calificó como “la dictadura del número, de un grupo que no se enteró aún que perdió las elecciones”.

“Quieren incendiar la provincia y desestabilizar al gobierno”, han dicho los voceros del gabinete sobre el grupito que integran los diputados Touriñán, Di Filippo, Dufour y Meza Evans. Habrá que ver qué afirman luego del próximo martes, si en el bloque del FPV llegan a aprobar una andanada de pedidos de informe, y en los próximos días logran avanzar en reformas a la ley de endeudamiento, una nueva ley de coparticipación y un cupo femenino para el Superior Tribunal.

Está todo dado para un año de duros enfrentamientos. Hasta ahora los dos bandos se han esforzado para demostrar quién tiene más poder y es capaz de hacer más daño. Hace cuatro meses, los chubutenses expresaron su voluntad con un resultado muy ajustado. El Ejecutivo quedó en manos de un partido, y el Legislativo  en manos de su rival. El mensaje obvio de las urnas es que hay que consensuar y dialogar. Parece que hasta el momento nadie ha tomado nota de ese mandato popular.