La tormenta perfecta: la baja del petróleo trae más problemas a Chubut
La abrupta caída del precio del petróleo sumó elementos más que preocupantes a la crisis que atraviesa la provincia del Chubut, ya que la cotización en la franja de los 35 dólares para el barril tipo Brent con que abrió este lunes retrotrae la situación al primer bimestre de 2016.
COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - La abrupta caída del precio del petróleo sumó elementos más que preocupantes a la crisis que atraviesa la provincia del Chubut, ya que la cotización en la franja de los 35 dólares para el barril tipo Brent con que abrió este lunes retrotrae la situación al primer bimestre de 2016. Con ese orden de precios, las regalías de Chubut pueden oscilar entre 27 y 25 millones de dólares por mes, mientras que con una cotización de 62 dólares, como promedió en junio de 2015, la recaudación había sido de 35 millones de dólares. Es decir una merma no inferior a los 8 millones de dólares por mes, que puede ampliarse si también disminuye la producción.
Por si había que sumar un dato negativo a la crisis financiera y económica que atraviesa Chubut, el mercado internacional del petróleo aportó entre el viernes y las primeras horas de este lunes la peor noticia posible, con una abrupta caída (22 por ciento menos) frente al cierre del viernes, cuando ya se vislumbraba la aceleración de la crisis, con apenas 45 dólares por barril.
El fracaso de la OPEP para acordar un nuevo recorte de la producción, a fin de hacer frente a la retracción de la demanda por el coronavirus, profundizó la debacle que ya se vislumbraba desde febrero y que se aceleró nuevamente en las últimas dos semanas, por el impacto del virus en los países europeos.
Inserto en ese contexto internacional, los ingresos de Chubut pueden empeorar no sólo por la relación directa sobre el valor de las regalías, sino también por el grado en que puede verse afectada la actividad, ya que la caída de demanda hace temer por una fuerte baja en la producción, lo que multiplica los impactos.
ANTECEDENTES CERCANOS
Cuando el barril de crudo Brent cotizó en torno a los 30 dólares, como en los meses de enero y febrero de 2016 (ese año se recuperó levemente, pero siguió por debajo de 50 dólares), las regalías de Chubut cayeron a 27,4 millones de dólares y 25,3 millones de dólares, respectivamente. Comparado contra junio de 2015, con una cotización de 62 dólares en promedio de ese mes, la provincia había recaudado 35 millones de dólares.
Sin embargo, hoy esa referencia puede ser más baja. Es que en aquel momento no había retenciones a la exportación, mientras que en la actualidad rige una norma que en el primer bimestre de este año todavía reducía en un 12 por ciento el precio final sobre el que se liquida el gravamen a favor de la provincia.
Con la reglamentación de la ley de emergencia, esa quita debería bajar hasta el 8 por ciento, pero en todo caso significa un recorte adicional. Sobre 35 dólares, significa 3 dólares menos, además de la penalización por transporte que afecta tradicionalmente al crudo Escalante, que por estas horas puede estar cotizando por debajo de los 30 dólares por barril.
¿LOS INGRESOS PUEDEN CAER UN 50%?
La comparación de los ingresos del primer trimestre de este año habrá que cotejarlas contra los últimos meses del año pasado, para entender cuánto más puede impactar en la situación actual, en la que el gobierno provincial ya le faltan hoy –sin contar las posibles bajas de ingresos- 1.600 millones de pesos por mes para completar el pago de salarios a agentes estatales.
En octubre último, con una cotización promedio de 59,71 dólares por barril (tipo Brent), Chubut recaudó 28,7 millones de dólares; en noviembre, con un barril de 63,21 dólares, Chubut embolsaba 29,2 millones de dólares; y en diciembre, con el crudo en 67,31, la provincia registró ingresos por 32,4 millones de dólares.
Hoy, en condiciones similares de producción y marcos impositivos, la caída de ingresos mensuales puede ser mucho más directa y cercana al recorte total del precio que, como surge de la estadística oficial, significa un recorte superior al 50 por ciento.