Ahorcó a su pareja en Sarmiento y le dieron cadena perpetua: apeló el fallo pero la Justicia ratificó la condena
Se trata de Rubén Isaac Cueva quién asesinó el 11 de febrero de 2020 a Elizabeth Gallardo, una portera de una escuela de Sarmiento de 38 años. El Superior Tribunal de Justicia ratificó la condena contra el hombre que ya había sido jugado en un juicio oral y público el año pasado.
Rubén Isaac Cueva fue condenado a prisión perpetua en agosto del año pasado tras ser encontrado penalmente responsable del homicidio agravado de su pareja, Inés Elizabeth Gallardo de 38 años, en la localidad de Sarmiento.
El Superior Tribunal de Justicia ratificó en los últimos días la condena a prisión perpetua por el crimen ocurrido el 11 de febrero de 2020.
El fallo confirmó así la sentencia de primera instancia del tribunal del juicio realizado en Sarmiento y también ratifica lo dispuesto por la Cámara Penal de Comodoro Rivadavia, aunque solicitaron modificar la calificación legal por tratarse de un femicidio íntimo.
El homicidio ocurrió a principios del mes de febrero del año 2020, pero de acuerdo a la acusación formulada por la fiscalía, los episodios de violencia habían empezado tiempo antes.
La víctima y el homicida se habían conocido a principios del año 2019 e iniciaron una relación a distancia, hasta que finalmente en diciembre de ese año contrajeron matrimonio, pero según allegados a la pareja que testificaron en el juicio, la convivencia se tornó violenta desde ese momento, “signada por discusiones y actitudes de control de Cueva hacia Gallardo, quien no la dejaba sola en ningún momento, como si se tratara de un objeto de su propiedad”.
La muerte de la mujer, quien se desempeñaba como portera en una escuela de Sarmiento, ocurrió durante la noche del 11 de febrero de 2020. Cuando se inició una discusión en el domicilio donde ambos convivían, que derivaría en posteriores agresiones físicas y la muerte de la mujer provocada por estrangulamiento a manos de Cueva.
Los testigos del caso confirmaron tanto la relación de pareja como episodios de violencia física de parte del acusado, e incluso una expareja de Cueva confirmó al tribunal haber vivido una experiencia similar años antes, de la cual pudo escapar.