Al prefecto lo mataron con el arma de un policía y piden a los retirados que las devuelven
La decisión de las autoridades policiales se dio tras el homicidio ocurrido el viernes pasado en Puerto Deseado. El joven que asesinó al prefecto utilizó el arma de su padre.
PUERTO DESEADO (ADNSUR) - La Jefatura de Policía de Santa Cruz ordenó a todos los efectivos en retiro que entreguen sus armas reglamentarias. La decisión se tomó tras confirmarse que la pistola con la que asesinaron al prefecto Ricardo Soto, como la que se utilizó días atrás en el barrio San Benito de Río Gallegos, eran de efectivos policiales.
Luego de que se constatará que el arma utilizada por Pedro Espinoza para asesinar a quemarropa al prefecto Ricardo Soto, el pasado viernes en Puerto Deseado, era reglamentaria, la Jefatura de Policía ordenó a todo su personal retirado que las reintegren.
La resolución fue firmada por el jefe de Policía comisario general (R) José Luis Cortés. Y allí también se confirma que en el violento tiroteo que ocurrió hace más de una semana en el barrio San Benito de Río Gallegos, los jóvenes detenidos utilizaron armas que también pertenecía a un policía y había sido robada tiempo atrás.
En cuanto al homicidio del prefecto, la pistola calibre 11.25 que utilizó Pedro Espinoza para dispararle a Ricardo Soto era de su padre, retirado de la Fuerza. Mientras que el arma 9 mm, que fue secuestrada por la Comisaría Séptima luego del tiroteo en el San Benito el pasado 7 de abril, pertenecía a otro miembro de la Policía. Había sido robada en 2011 de su vivienda.
“En ambos episodios las armas utilizadas por las personas involucradas pertenecían a personal policial retirado de esta institución”, se indicó en el comunicado, donde además se recordó que fue hasta el 2015 que “personal policial sin distinción de jerarquía que se acogía al retiro voluntario y si así lo requería era autorizado a continuar con la portación del arma reglamentaria, debiendo realizar todos los trámites correspondientes en la Anmac”.
El último informe de la Dirección General de Logística de la Policía indicó que un gran número de efectivos retirados aún cuenta con el arma reglamentaria en su poder. También, en los últimos años se han acrecentado los casos de robo y extravío del arma de los efectivos, así lo informó La Opinión Austral.
“Es obligación de esta Jefatura de Policía tomar las medidas necesarias respecto de la portación de armas del personal policial retirado, entendiendo que el arma reglamentaria no pertenece en forma individual al efectivo policial sino a la Policía de la provincia de Santa Cruz”, manifestaron.