Luego de la amenaza de bomba que provocó, el pasado jueves 4 de noviembre, que los estadios de fútbol y básquet del Deportivo Madryn sean desalojados, la Justicia allanó en las últimas horas a un barra brava del Club Cipoletti de Río Negro, acusado de ser el autor de la llamada.
El episodio había tenido lugar mientras el equipo chubutense se jugaba el ascenso a la Primera Nacional ante Racing de Córdoba, en Buenos Aires, y había generado preocupación en la entidad de Madryn pese a que tras los trabajos de rigos se confirmó que la alarma era falsa.
Sin embargo, el Ministerio Público Fiscal de la ciudad inició una investigación al respecto, y determinó que el quien había realizado la amenaza había sido un barra brava del club de Río Negro "despechado" por la situación futbolística.
Entró borracho a un club del centro e insultó y tomó del brazo a la encargada por no venderle alcohol ni comida
Tras el allanamiento se le secuestró al hombre su teléfono celular y el chip, para ser peritados, y se lo imputó por “intimidación pública”.
El Código Penal, cabe destacar, prevé para estos casos “prisión de dos a seis años, el que, para infundir un temor público o suscitar tumultos o desórdenes, hiciere señales, diere voces de alarma, amenazare con la comisión de un delito de peligro común, o empleare otros medios materiales normalmente idóneos para producir tales efectos”.