Atacó con arma blanca a comerciante de Km.5 y quedó libre
Tiene prohibido acercarse al local donde aconteció el hecho
COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - En horas de la mañana del miércoles se desarrolló la audiencia de control de detención y apertura de la investigación en contra de Ana María Ojeda por un hecho acontecido el pasado 20 de junio en cercanías de una pollería en km. 5, en donde amenazó a la dueña con un cuchillo. El juez decretó la prohibición de acercarse al lugar comercial donde aconteció el hecho y decretó su libertad.
La audiencia fue presidida por Mariano Nicosia, juez penal; por el Ministerio Público Fiscal se hizo presente Fabiola López, funcionaria de Fiscalía; en tanto que la defensa de la imputada fue ejercida por Vanesa Vera, abogada de la Defensa Pública.
La funcionaria de fiscalía se refirió brevemente al hecho a investigar cuando el pasado 20 de junio, siendo las 10.30 hs., la imputada se presentó en el local comercial, una pollería de Km. 5; y en momentos en que llegó la dueña comenzó a arrojar golpes de puño en su rostro y con un cuchillo arrojó puntadas, diciéndole: “te voy a matar”.
La víctima logró esconderse en el negocio, llamó a la policía, quién llegó al lugar y detuvo a Ojeda.
El hecho fue calificado provisoriamente como “amenazas agravadas por el uso de arma, en concurso real con lesiones leves”, en calidad de autora para Ojeda.
La defensora, por su parte, no formuló objeciones. Por su parte, la imputada accedió voluntariamente a declarar diciendo que “lo que manifiesta la víctima es al revés. Ella me atacó con su hija”. Es más, dijo tener un golpe en su cabeza. “Fue ella la que me atacó en la vereda y no puede tener ningún puntazo”, aseguró Ojeda.
Seguidamente, la representante de Fiscalía solicitó se declare legal la detención de Ojeda ya que personal policial tomó conocimiento del hecho por la víctima, que describió a una persona de sexo femenino, y cuando llegó al lugar fue la propia víctima la que sindicó a la presunta autora. Ojeda al percatarse de la presencia policial arrojó un elemento al suelo, que luego se constataría que se trataba de un cuchillo, por lo cual solicitó que se declare legal la detención de la imputada ya que la misma fue realizada en flagrancia, solicitando como medida la prohibición de contacto con la víctima.
Por su parte, la defensora no objetó la legalidad de la detención, pero sostuvo que la medida de protección de prohibición de contacto va a ser de imposible cumplimiento, ya que ambas son vecinas, proponiendo que no se puedan comunicar.
Finalmente, el juez penal resolvió declarar legal la detención de la imputada ya que a pesar que Ojeda “dijo haber sido ella la víctima, no hay dato alguno en la causa para acreditar este modo”.
La víctima refirió que fue agredida con un cuchillo y le fue secuestrado a Ojeda cuando arrojaba uno, así que pareciera ser verosímil su versión y justificada su detención en flagrancia.
Decretó la prohibición de acercarse al lugar comercial donde aconteció el hecho y formalizando la apertura de investigación preparatoria del mismo, dándola por anoticiada y por asegurada su defensa técnica. Finalmente, al no ser solicitada medida de coerción alguna, decretó su libertad.