Chubut: se enfermó de cáncer y su empleador le hizo una falsa denuncia por robo para despedirlo
El dueño de una empresa de avistajes de ballenas denunció el robo de herramientas que fueron halladas en la casa de un empleado, tras un allanamiento. Ahora el empresario enfrenta un proceso judicial por falsa denuncia.
Un empresario que había despedido a su empleado acusándolo de un robo, ahora afrontará un proceso por falsa denuncia, ya que en realidad habría buscado despedir al trabajador tras enterarse de que éste atraviesa una grave enfermedad, con diagnóstico de cáncer. El hecho ocurrió en Puerto Pirámides y, según el fallo al que tuvo acceso ADNSUR, involucra a una firma dedicada al avistaje de ballenas y uno de los patrones de embarcación y designado responsable de seguridad la flota.
“Repugna a las más elementales reglas humanas la conducta del denunciante Héctor Alberto Resnik”, señaló el fiscal Daniel Baez en su escrito de desestimación de denuncia por robo, antes de dar impulso a una nueva acción persecutoria, ahora en contra del denunciante:
“No es mi tarea realizar reproches morales pero sí lo es dentro de mis facultades, dispuestas por la ley, ordenar el inicio de un caso e instalar la acción penal” por la que será investigado el nombrado Resnik.
La historia del caso encierra una situación grave de salud de Juan Pablo Martorell, empleado de la firma Southern Spirits. El 21 de julio último la policía de Puerto Pirámides había allanado el domicilio de Martorell, donde se halló una caja de herramientas que su empleador, Resnik, había denunciado como robados un día antes.
“Aquí aparece la primera inconsistencia que permite dirigirse lentamente hacia la falacia de la denuncia –dice el fiscal, en referencia a el empresario dijo que los elementos fueron sustraídos entre diciembre y el 20 de julio-. En 8 meses el denunciante no advirtió los faltantes de los elementos que luego, con precisión, denuncia como sustraídos”.
En el fallo al que tuvo acceso ADNSUR, el fiscal también toma en consideración, además de los documentos probatorios de por qué se encontraban los elementos hallados en la casa del empleado, el testimonio de un policía, que reconoció que la denuncia del empresario apuntaba a despedir al empleado.
En efecto, días después de la denuncia por robo, el empresario le envió una carta documento para comunicarle el despido, a raíz del supuesto hecho delictivo, por el que acusó falsamente al empleado.
Lo que en realidad había ocurrido es que Martorell era la persona designada para el manejo de la seguridad de la empresa, por la caja de herramientas era parte de los elementos que él mismo debía llevar cada vez que salía a navegar con el submarino que operaba la empresa.
“La ‘persona designada’ es una figura legal ante la Prefectura Naval Argentina, que implica la responsabilidad de seguridad en cuanto a las embarcaciones, como enlace entre los capitanes y el empresario –contó Martorell, ante la consulta de ADNSUR-. Yo además soy responsable del ‘Yellow Submarine’, del que era capitán y la caja era la que llevábamos a bordo de la operación, para utilizar en caso de emergencia. Lo mismo que los elementos portantes de comunicación que encontraron en mi casa y que formaron parte de la falsa denuncia”.
Del mismo modo, señaló que el plasma de corte es una herramienta que le había prestado Resnik porque su casa estaba en obra.
“Cuando me iban a operar por una metástasis, me acusó de un robo que no existió”
Martorell relató que la relación laboral con Resnik había comenzado a desmejorar durante la pandemia, ante una baja de sueldos, por lo que “hicimos un reclamo pero en las últimas conversaciones se había tornado bastante agresivo. En abril de este año tuve un diagnóstico complicado de enfermedad, intenté hablar con él pero no llegamos a ningún acuerdo, por lo que hice un reclamo por carta documento por falta de aportes y plata que me debía. Entonces me mandó carta documento intimándome a trabajar, a sabiendas de que yo estaba con este diagnóstico de cáncer"
"El armó la causa unos días antes de operarme, con una cirugía muy compleja porque era una metástasis entre arterias y nervios; me manda a allanar mi casa, pero como el fiscal dice, hasta un policía reconoció que la denuncia la hizo para despedir a un empleado”, señaló a ADNSUR.
El empleado lamentó que su nombre quedó manchado por la difusión que tuvo el caso, que al principio se presentó como “el robo de un empleado desleal”, por lo que anticipó acciones legales en ese sentido. "Es común que en Pirámides, donde no hay ferreterías, los vecinos prestemos herramientas", graficó Martorell.
“Por suerte estoy muy bien, la operación fue exitosa y ya estamos en la etapa final del tratamiento, los médicos dicen que lo agarramos a tiempo porque un par de meses más tarde hubiera sido irreversible. Ahora quiero que se aclare el tema en la parte legal, más allá de que confiaba en la justicia de Chubut, pero uno nunca sabe hasta dónde llega el armado de una causa”, concluyó.