Crece la incertidumbre por la desaparición de Lian: renunció la abogada de la familia
La abogada de los padres, Marina Romano, presentó su renuncia tras realizar una serie de cuestionamientos sobre la intervención que lleva a cabo la fiscalía por la desaparición del menor de 3 años en Córdoba.
Más de 72 horas ya pasaron desde que la familia de Lian Gael Flores Soraide lo vio por última vez. Fueron sus padres quienes, tras despertar de una siesta el sábado por la tarde en la localidad cordobesa de Ballesteros Sud, notaron que no estaba en la casa.
Este martes se conoció que la abogada de los padres, Marina Romano, presentó su renuncia. La profesional tomó la decisión tras una serie de cuestionamientos sobre el método de trabajo de la fiscalía a cargo de Isabel María Reyna y Nicolás Gambini.
Según contó, los padres del nene de 3 años estuvieron declarando el lunes durante diez horas y revelaron que, tras la indagatoria, les pidieron no hacer más declaraciones a los medios.
Romano también cuestionó la asistencia que recibió la familia en las últimas horas y recalcó que en varias ocasiones les reiteraron desde la fiscalía que ellos eran testigos en la causa y "no necesitaban abogados".
"Cuando salió de declarar el papá, me dijo que le habían pedido que no haga más declaraciones sobre el hecho. La fiscalía no nos trasladó ninguna hipótesis. Nos ha pedido que no hagamos más declaraciones porque quieren trabajar sin obstáculos", reveló la abogada en declaraciones radiales a Mitre Córdoba, según publica Minuto Uno.
¿UNA VENGANZA?
Elías Flores, el papá de Lian, no descartó la hipótesis de un secuestro. “Estoy muy preocupado, pienso que alguien lo tiene. Me duele mucho”, expresó entre lágrimas en diálogo con un noticiero.
Y rogó: “Pido que aparezca, por favor. No sé si será alguna venganza o qué sé yo, pero que aparezca mi niño, porque es un niño tranquilo, el más tranquilo de la familia, inteligente, habla, camina y juega”.
Los rastrillajes siguen sin aportar datos positivos sobre el actual paradero del niño hasta el momento y la incertidumbre sigue creciendo en torno a cómo fue que desapareció.
“Había una chata que había entrado al lugar, ese es el que pienso que es más sospechoso. Yo conozco a mi hijo y no puede ir unos 200 o 100 metros más lejos con semejante calor”, afirmó sobre la hipótesis que se manejan por estas horas.
Editada y redactada por un periodista de ADNSUR
