Lo que parecía una escapada perfecta para una familia de Catriel terminó de la peor manera tras un control policial de rutina en San Martín de los Andes. Mientras circulaban en su Ford Ka por la céntrica avenida San Martín, la policía neuquina detuvo el vehículo para verificar la documentación, y lo que encontraron terminó arruinando las vacaciones: el auto tenía pedido de secuestro por robo.
La revisión del Comando Radioeléctrico comenzó a levantar sospechas rápidamente. La numeración de los cristales del vehículo no coincidía con la patente que llsevaba, y al inspeccionar la documentación, notaron que tanto la tarjeta verde como el seguro no cumplían con las normas de seguridad requeridas. La situación se complicó aún más cuando los agentes verificaron el chasis del auto y descubrieron que pertenecía a otro vehículo con pedido de secuestro desde el partido de Tres de Febrero, en Buenos Aires.
"Estás más seco que...": 'El Marito' le respondió a Alex Caniggia y lo invitó a conocer la Patagonia
Frente a esta irregularidad, la policía procedió a secuestrar el vehículo, mientras que el conductor fue imputado por encubrimiento, aunque se espera que la investigación avance para determinar su grado de responsabilidad en el hecho. Mientras tanto, la familia, que esperaba unos días de descanso en la ciudad lacustre, terminó viéndose obligada a regresar a Catriel en colectivo, con las vacaciones frustradas.
Con información de Cipo360, bajo supervisión y edición de un periodista de ADNSUR.