Desmienten abusos de poder en la Comisaría de Km. 8
Por un hecho que ocurrió el sábado, cuando detuvieron a un sospechoso de un intento de robo.
COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - El descargo lo hizo el subcomisario Farsi, segundo jefe de la comisaría de Km. 8, que dio su versión de lo ocurrido el pasado sábado en momentos en que intentaron detener a cinco sospechosos de un intento de robo, en el que resultó lesionada una joven policía.
El hecho ocurrió "el sábado, cuando unos albañiles de apellido Esquivel estaban haciendo dedo para ir a Caleta Córdova y vinieron cinco muchachos de las 194 Viviendas que los apuraron con un arma para robarles", explicó el jefe policial y agregó: "cuando los estaban identificando, a la cabo Vilma Henrichson, la tiraron al piso y la golpearon. Le patearon la cabeza y la mano. Pedimos colaboración y lograron detener cerca de la comisaría a uno de ellos, Jonathan Troncutto, los otros se escaparon. Lo trajeron a la comisaría y se hicieron las actuaciones de rigor".
Farsi dijo que “el fiscal dispuso que quede detenido y buscamos alojamiento en otras comisarías porque acá no tenemos calabozos. Después de la detención vino la madre de esta persona con un montón de vecinos pretendiendo que lo soltemos. El detenido desde adentro les gritaba, pero acá había un solo guardia, porque no tenemos gente, hay un solo interno y tenemos dos policías afectados a una consigna, así que solo contamos con cinco policías por turno".
"NO SON TAN IMPORTANTES"
En defensa de los policías que se vieron implicados en este incidente, Farsi detalló la situación de la comisaría y la falta de personal. “La madre salió diciendo que la cabo se golpeó la cabeza con un poste, eso es una locura. Quiero dejar en claro que los policías somos personas con familia, con hijos, y no vamos a andar haciendo cosas payasescas en la detención de una persona. Además ellos no son tan importantes como para que nosotros vayamos a detenerlos porque los perseguimos".
En diálogo con Diario Crónica destacó que "no son tan importantes como para que dejemos de hacer prevención por ellos, que son un grupo bien identificado, son siempre los mismos, del mismo sector, todos de las 194 Viviendas. Son los mismos que hace dos años tuvieron un problema grande en un enfrentamiento después de un partido. Nosotros siempre tratamos de mantener la cordura y la consigna es no reprimir, cosa que acatamos".
EN LA CANCHA SE CRUZARON CON INFANTERÍA
“En cuanto al tema de la cancha de Petroquímica nos acusan de haber disparado con las escopetas", sostuvo el subcomisario, quien explicó: "terminado el partido los policías se corrieron para que no haya ningún problema y así y todo tiraron piedras, pero nosotros tenemos la orden de no reprimir y la acatamos. Se fueron, pero fuera de la cancha se cruzaron con efectivos de Infantería que volvían de otro sitio y les empezaron a tirar piedras desde la calle. Ahí es donde bajaron los infantes y comenzaron a tirar para disuadir. Hubo corridas, como pasa en estos casos".
POCO PERSONAL Y SIN LUGAR
Probablemente la de Km. 8 sea la comisaría más desprovista de las que hay en Comodoro. Emplazada en forma provisoria desde hace años en la entrada del viejo predio de Petroquímica, el edificio es una vieja construcción dividida por un camino de entrada al depósito de autos.
Los efectivos que hay en esa dependencia tienen que lidiar no solo con la más extensa jurisdicción sino con la falta de personal. Desde la rotonda de salida de Km. 5 hasta Caleta Córdova es todo de esa comisaría que solo tiene siete empleados por turno, de los cuales dos están afectados a una custodia y uno a la guardia, lo que deja solo cuatro efectivos para la calle. “Seis empleados se fueron de acá y solo se repuso a uno” explicó el subcomisario Farsi.
En cuanto a las condiciones edilicias, el jefe policial dijo que junto a la directora de Recursos Materiales comisario mayor Sandra Muñoz, había ido al predio que la Municipalidad cedió. Ese terreno ya fue cedido desde 2013, lo que falta es hacer la mensura del mismo. Pero aparentemente las rispideces entre los gobiernos municipales y provincial, no permiten avanzar con este proyecto.
La otra posibilidad era tirar abajo el edificio de la vieja comisaría y construir una nueva en ese predio. De cualquier manera todo está aún en etapa de estudio y no hay avances concretos, mientras la falta de personal continúa siendo el problema más grande que afrontan a diario los policías de esa conflictiva zona.