Doce testimonios en una nueva jornada del juicio por el homicidio de Alan Nahuelmilla
Declararon dos policías y una oftalmóloga que atendió a la otra víctima y sobreviviente del hecho. Este miércoles se retomará el debate en la Oficina Judicial del barrio Roca.
COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - En la sala de audiencias de la Oficina Judicial del barrio Roca se concretó este martes una nueva jornada del juicio oral y público por el homicidio de Alan Nahuelmilla, ocurrido el pasado 14 de abril de 2018 en la zona de quintas de nuestra ciudad.
Doce fueron los testimonios receptados este martes, tres de ellos por videoconferencia. Para mañana miércoles se espera continuar con la recepción de la prueba testimonial del caso.
El primer testigo fue un Oficial ayudante que al día del hecho se encontraba de servicio en la Seccional 7° de policía. Realiza un Acta de Inspección ocular en el domicilio, luego de tomar conocimiento que en el lugar se habían producido disturbios. En el momento que se encontraba haciendo la diligencia lo llama el Comisario Loyola informándole que el domicilio estaba relacionado con el homicidio de Alan Nahuelmilla y le indica que se comunique con el entonces responsable de la Brigada de Investigaciones, Comisario Cerda.
El segundo testimonio fue el del Oficial Principal Fernando Arce, responsable del área de Criminalística local, quién expuso actas e informes fotográficos relacionados al hecho. En un primer momento es convocado por sus pares de la Brigada ya que allí se encontraba la segunda víctima del caso, que había sufrido una agresión el día anterior en un domicilio de la calle Los Duraznos y Miroglio.
Según el relato, esta segunda víctima-sobreviviente presentaba lesiones en el rostro principalmente y también en todo su cuerpo. Seguidamente, junto a su personal, realizan una inspección nocturna, y luego otra diurna del lugar del hecho.
Recuerda que había un grupo de personas que había atacado la vivienda y un auto estacionado afuera de un vecino. De la Inspección recuerda que se levantaron muestras de manchas hemáticas por contacto y por goteo dinámico hacia abajo sobre la calle Los Duraznos. También exhibió fotos de una pala de construcción en el techo de la vivienda con presuntas manchas hemáticas que fue secuestrada, como también relevaron manchas hemáticas en paredes y el suelo del patio de la casa.
Otro testimonio fue el de una profesional de la medicina con especialidad en oftalmología que atendió como paciente a la segunda víctima-sobreviviente al hecho. Examinó al paciente con lesiones en el rostro, edema de los dos ojos con hematomas y derrames. Le miró la retina y estaba bien. El nervio óptico estaba bien, los vasos estaban bien, normal, no había desgarro ni hemorragia en la retina. Le receta un corticoide con antibiótico para el edema macular.
El tribunal de debate fue integrado por los jueces Mariano Nicosia, Raquel Tassello y Mónica García; el Ministerio Público fiscal representado por Camila Banfi, fiscal general; en tanto que los imputados fueron asistidos por Mauro Fonteñez y Fiorella Picón, abogados particulares de los mismos.
El homicidio de Alan Nahuelmilla
El hecho imputado en la acusación acontece el pasado 14 de abril de 2018, ceca de las 23.00 horas, cuando la víctima Alan Nahuelmilla y un amigo B. G. circulaban por la calle Los Duraznos, en zona de quintas, y fueron emboscados por los cuatro imputados armados.
Procedieron a maniataros y atarlos con una soga y arrastrarlos con la camioneta trasladándolos hasta la vivienda de uno de ellos. Una vez en el lugar los sometieron a ambos a diversos tipos de castigos físicos golpeándolos con patadas y golpes en la cabeza con una pala, con la cacha de armas de fuego y le cortaron a uno de ellos las orejas con un alicate en reiteradas oportunidades.
Los desnudaron y les tiraron agua fría, tiraban tiros al cielo y amenazaban con matarlos reclamándoles les dijeran donde estaba el televisor. Todo ello por un lapso de cuatro horas, mientras filmaban la agresión.
Ya en la madrugada del 15 de abril de 2018 los imputados se retiraron del lugar junto a una de las víctimas, Nahuelmilla, arrastrándolo hasta el domicilio de uno de sus tíos donde lo abandonaron.
Al regresar al lugar los imputados que aún mantenían retenido a B. G. continuaron con los golpes hacia éste, hasta que aproximadamente a las 8 de la mañana lo liberaron previo amenazarlo que no denuncie lo sucedido. Así B. G. huyó hacia su domicilio para luego ser trasladado al Hospital Regional.
Por su parte los familiares de Nahuelmilla lo trasladaron hacia el Hospital donde luego de unas horas fallece por “traumatismo grave de cráneo por hemorragia intra-cerebral a causa de los golpes recibidos”.