El Superior confirmó condena a dos pediatras por muerte de un bebé
Se trata de Hugo Mantuano y Roxana Barrientos, a quienes en 2016 se los declaró penalmente responsables y se los inhabilitó durante cinco años para ejercer la pediatría.
COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - El Superior Tribunal de Justicia declaró improcedente la impugnación extraordinaria de los pediatras Hugo Mantuano y Roxana Barrientos y confirmó la sentencia condenatoria impuesta a ambos, declarados responsables por mala praxis tras la muerte de un bebé de 35 días ocurrida en febrero de 2014 en la guardia del sanatorio La Española.
"¡Gracias por estar cuando los necesitamos! Un abrazo grande y un paso más para que nuestro bebé, Nicolás Russo, descanse en paz", manifestaron los padres del bebé fallecido, Paula Civitareale y Víctor Russo este martes.
En octubre de 2016, los médicos Hugo Mantuano y Roxana Barrientos fueron declarados penalmente responsables y se les impuso pena en suspenso de un año y medio, y tres años de prisión, respectivamente, además de la inhabilitación por cinco años para ejercer la pediatría.
EL CASO
El bebé de apenas 35 días había vomitado una sustancia color amarillo por lo que fue trasladado inmediatamente por sus padres a la Guardia Pediátrica de La Española y allí los atiendió Mantuano. El doctor colocó al bebé en la camilla y le indicó a sus padres que debían esperar los resultados del laboratorio y una vez que estuvieran debería consultar con su sucesora en la Guardia, Roxana Barrientos.
Según indicaba la acusación fiscal, el médico omitió tomar la temperatura del bebé y tampoco midió el nivel de oxígeno en la sangre ni ordenó una radiografía del tórax. Además, no realizó ningún tipo de control al niño, provocando que el cuadro se agravara.
Respecto del proceder de Roxana Barrientos, los padres de la víctima le suplicaban que atendiera a su bebé, ya que notaban que su situación empeoraba, pero ella les decía que no “hasta que tenga los resultados del laboratorio”.
Luego ingresaron nuevamente a la víctima a la Guardia, le colocaron una máscara de oxígeno para adultos, pidieron a sus padres que se retiraran y comienzan, junto a otro médico pediatra, una ventilación mecánica.
Luego de 25 minutos el niño falleció bronco aspirado.