El taxista cambió versión y dijo que a Rojas la mataron “otros”
Aseguró que lo amenazaron. El fiscal y el abogado querellante no le creen.
PUERTO MADRYN (ADNSUR) - El taxista imputado por el crimen de la estudiante Diana Rojas decidió declarar y dijo que a la joven la mataron otras personas. Y que este tiempo no declaró porque estuvo amenazado. La fiscalía y la querella sostuvieron su imputación por perpetua. “No le creo”, dijo el querellante.
El taxista Dante Donnini, imputado por el crimen de Diana Rojas, volvió a declarar y modificó sus dichos iniciales. Ahora dice que a la joven la mataron otras personas y que él no lo dijo antes porque tenía miedo. La audiencia se realizó la mañana del miércoles en Tribunales, donde inicialmente los fiscales Daniel Báez y Jorge Bugueño, junto al abogado querellante Carlos Villada, formularon nuevos cargos contra Donnini, que prevén prisión perpetua.
Donnini decidió declarar nuevamente ante el juez Marcelo Orlando y reformuló sus dichos. "En la primera declaración lo tendría que haber dicho pero estaba desubicado, estaba confundido, porque en el interior sabía que estos monstruos estaban libres”, dijo ante el juez, luego de pedir un mapa de la ciudad.
Según esta nueva versión, cuando él llevaba a Diana Rojas en el taxi se subieron personas al vehículo y se llevaron a la joven de 25 años en una camioneta. “Cuando la llevaba frena un auto y le toca bocina. Era un Ford Ka gris polarizado. Baja una persona y le dice “tenemos que terminar de hablar”. Abre la puerta y la toma de la mano. Ella lo conocía”, relató Donnini.
Continuando con sus dichos, Donnini explicó que su ADN estaría presente en el cuerpo de Diana Rojas porque trató de defenderla. “Me giro, le digo “eh loco que te pasa” y la intento meter al auto. Me toma del brazo, hace fuerza y se zafa. La trato de agarrar, del hombro, de la cartera. El cierra la puerta del auto y pega un portazo”, sostuvo el taxista. “Después la agarran de los pelos, la bajaron del taxi y la subieron a la camioneta”, dijo en su relato de más de una hora.
Luego mencionó que lo llevaron a las Quintas del Mirador y se llevaron elementos del taxi, entre ellos, una soga y una rejilla que contenía semen suyo. “La agarran y la bajan a Diana. Me golpean y me dicen que vaya a las Quintas. Adentro del taxi me dijo ´quédate piola´. Tenía una pistola. Pensé que era un robo”, dijo en su alegato. Y sostuvo que lo amenazaron: “No digas nada, olvídate de todo, o tu familia va a aparecer en un zanjón”.
Los acusadores le preguntaron por qué no llamó a la policía. “Llamar al 101, lo pensé pero no lo hice. Sólo me fui a la YPF y me compré la Pepsi y no quise decir más nada. Está mal”, fue la respuesta de Donnini.
EL ABOGADO DE DONNINI, TESTIGO
"No sé dónde estaba Diana Rojas. Se fue en esa camioneta adentro de la Ford Ranger negra para Solanas. No sé más nada de esta chica. A donde llevaron a Diana no sé. Nunca estuve en el lugar donde mataron a Diana Rojas”, dijo Donnini. Cuando le preguntan a Donnini si podría hacer identikit de las personas que participaron de la cuestión, dijo que los vio de atrás y de perfil, porque él miraba para abajo. También, en el marco de su relato, sostuvo que su abogado defensor es testigo en la causa. “Hay un testigo. Una persona de pelo blanco que pasaba en bicicleta. Es el doctor Castro”, dijo Donnini señalando a su abogado.
Los fiscales le preguntaron porque declara luego de cuatro meses. “Sentí miedo”, fue la respuesta del imputado. “Vi las primeras fotos en las redes sociales. Cuando vi la foto se me hizo un nudo, lo asocié todo. Dije que no iba a decir nada, que los iba a proteger. Estas personas lo podrían haber hecho con mi hija, con mi esposa”, relató Donnini.
EL FISCAL Y EL QUERELLANTE NO LE CREEN A DONNINI
“Donnini acomodó su declaración, después de cuatro meses, en base a las pruebas que lo incriminan”, afirmó el fiscal Daniel Báez y sostuvo que se trata de “una estrategia defensista". “No le creo. Me baso en las pruebas”, dijo Báez. Y mencionó una pericia psiquiátrica sobre rasgos de personalidad de Donnini.
El abogado querellante tampoco le creyó al imputado. “No le creo nada, las pruebas son contundentes”, afirmó Villada finalizada la audiencia a los medios. “Fue un acting, estuvo preparado”, sostuvo.
PERPETUA
La investigación se inició bajo la calificación de “homicidio en ocasión de robo”, que prevé una pena de 10 a 25 años de prisión. Pero con este cambio de calificación, la pena para Donnini, en caso de ser encontrado culpable en juicio, es de reclusión perpetua. Así lo prevé el Código Penal argentino en su artículo 80. La calificación legal esbozada por los fiscales Báez y Bugueño es la de “homicidio criminis causae en concurso real con intento de abuso sexual con acceso carnal; en concurso ideal con robo; todo ello en concurso ideal con homicidio agravado por ensañamiento”. En el mismo sentido, el querellante Villada modificó la calificación legal inicial que pesaba sobre el taxista Donnini y formuló imputación por el delito de “homicidio agravado por la violencia de género (femicidio) en concurso ideal con homicidio calificado por alevosía y ensañamiento en concurso real con homicidio criminis causae”.
LA EXPLICACIÓN SOBRE EL SEMEN DE LA REJILLA
En el lugar donde se halló el cadáver de Diana Rojas había una rejilla que tenía semen de Donnini, según determinaron las pruebas de ADN. El taxista dio una supuesta explicación sobre el hecho y contó que la noche anterior se subió una mujer al taxi que le practicó sexo oral. "Era una mujer morocha, muy linda", relató Donnini ante el juez y contó que se limpió con la rejilla. Luego, al otro día, las personas que -según él- se llevaron a Diana del taxi, también se llevaron la rejilla.
EL CASO
Diana Rojas fue asesinada de seis puñaladas en un descampado a pocos kilómetros de la ciudad, sobre la ruta provincial Nº 1. Su cuerpo fue encontrado por dos jóvenes que andaban en bicicleta por el sendero. La investigación y las pruebas apunta hacia un taxista, quien fue el último en llevar a la joven estudiante. Las pruebas fundamentales que se basan los acusadores son las pericias de ADN positivas en contra del imputado.
Tal como lo vienen sosteniendo, los fiscales mencionan como pruebas claves contra Donnini los estudio de ADN que determinaron en forma categórica que debajo de las uñas de Diana se halló el perfil genético del taxista, lo que indica que la víctima lo rasguñó en un intento de defensa. También analizan como prueba las lesiones que Donnini tenía en su cuerpo compatibles, según indicó el médico forense del Superior Tribunal de Justicia, con arañazos de una víctima que se defiende.
Asimismo, también incluyen en las pruebas la rejilla hallada en el lugar del hecho, que contenía semen de Donnini. Así como una soga, que tenía ADN tanto de Diana Rojas como del taxista imputado.
Entre otras pruebas, además, se basa la pericia realizada por criminalística sobre la correlación de las huellas del vehículo en la escena del crimen que son compatibles con las huellas del taxi. Y también la pericia en el GPS del celular de la víctima.