RÍO GALLEGOS - Es la cifra que se desprende de los datos publicados por el Sistema Nacional de Estadísticas de Ejecución de la Pena. A nivel nacional la población carcelaria creció un 41 por ciento, pasando de 54 a 76 mil personas. En Santa Cruz, entre condenados y presos, hoy son más de 400 los reclusos.

Según el informe, en 2006 había 54.000 personas privadas de la libertad, mientras que para 2016 el número se elevó a 76.261, lo que significó un aumento de la población penitenciaria argentina de un 41%.

Asimismo, a fines de 2016 se contaba en todo el país con 290 establecimientos carcelarios (Buenos Aires, con 54 prisiones, es la provincia con más centros de detención) y un total de 81.975 personas privadas de la libertad: 76.261 en unidades penitenciarias, 5.714 en comisarías o destacamentos y 1.686 con detenciones domiciliarias (en este último rubro sólo se cuenta con datos del sistema nacional y federal y de Buenos Aires).

Santa Cruz resultó ser la provincia “más encarceladora” del país, con un 280 por ciento de aumento en su población carcelaria en el periodo 2006-2016. La siguen de cerca Chubut con un 275 por ciento y Entre Ríos, La Pampa, San Juan y Formosa (todas con un 100 por ciento de aumento).

Otro dato significativo es que dos provincias disminuyeron sus respectivas poblaciones penitenciarias en los últimos diez años. Tales son los casos de Neuquén (-35 por ciento) y Santiago del Estero (-17 por ciento). En el caso de Buenos Aires (que alberga al 45 por ciento del total de la población penitenciaria del país), acompañó la media nacional con un crecimiento del 41 por ciento, mientras que el sistema federal solamente se incrementó en un 17 por ciento.

MÁS DE 400 RECLUSOS

Desde la Dirección Penitenciaria Policial precisaron hace poco más de una semana a La Opinión Austral que en la provincia de Santa Cruz son más de 400 los presos, entre condenados y procesados.

En Río Gallegos son unos 114 los reclusos, 41 de estos están en la Alcaidía y los restantes se encuentran en las comisarías Primera, Segunda, Tercera, Quinta, Sexta, Séptima y en Chimen Aike. En tanto, en Caleta Olivia también se supera el centenar de presos, que se reparten también entre la Alcaidía local y las dependencias policiales; Pico Truncado cuenta con una cifra de unos 90, cerrando el trío de las ciudades de la provincia con más reclusos.

El resto de las localidades de Santa Cruz tiene a El Calafate con 24; Puerto San Julián con 29 en su Alcaidía y otros 10 en la Comisaría Segunda; Puerto Deseado con 20; Río Turbio con 15; Las Heras con 14; 28 de Noviembre con seis, y Puerto Santa Cruz y Cmdte. Luis Piedra Buena con cuatro reclusos, ambas.

OTROS DATOS

Mientras la población penitenciaria creció alrededor del 40 por ciento para el período 2006-2016, los delitos denunciados aumentaron un 22,3 por ciento. Asimismo, por primera vez desde que se registran los datos (2002) la cantidad de personas condenadas (unas 40 mil) supera a la de procesadas (alrededor de 36 mil). Asimismo, el 96 por ciento de la población reclusa es masculina, el 61 por ciento de los presos es menor de 35 años de edad y casi el 70 por ciento solamente cursó hasta la escuela primaria.

Las estadísticas ratifican que el 70 por ciento de la población reclusa es primario (que carece de antecedentes penales), el 10 por ciento es reiterante (se encontraba procesado con anterioridad, sin sentencia firme), mientras que el 20 por ciento restante es reincidente (que había sido condenado con anterioridad).

Los delitos por los que más se encarcela continúan siendo los tradicionales: delitos contra la propiedad (robos y hurtos en sus distintas variedades), delitos contra las personas (homicidios), delitos contra la integridad sexual e infracciones a la ley de tenencia y tráfico de estupefacientes.

El 79 por ciento de los internos no participó de ningún programa de capacitación laboral durante 2016, en tanto que el 48 por ciento de la población (casi la mitad) no participa de ningún programa educativo. Esto por decisión personal o, también, insuficiencia de fondos del Estado para ofrecerlos. Aún así, con respecto a 2006, se aumentó en un 9 por ciento la participación en lo primero y en cuanto a los programas educativos, se pasó de un 31 por ciento a un 52 por ciento.

Del total de personas condenadas (39.373), solamente el 8 por ciento (2.781) goza de salidas transitorias, mientras que el 4 por ciento (1.537) goza del régimen de semilibertad. Por su parte, el 2 por ciento de la población tuvo disminución de penas: 625 personas de hasta 6 meses, 290 personas de hasta 1 año y 59 personas de más de un año.

El último dato de interés es el de las penas.

El grueso es de 3 a 6 años de prisión (12.519), de 6 a 9 años (7.975) y de 9 a 12 años (5.012).En tanto, con condenas que no alcanzan los 3 años de duración hay 3.839 personas, mientras que, en contrapartida, condenados a más de 18 años son 3.979 los individuos.

Fuente: pensamientopenal.org - La Opinión Austral

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