Escándalo en San Martín de los Andes: allanamiento a un chino reveló una red de trata de personas
Operativo policial descubrió a siete víctimas en condiciones inhumanas y confiscó una millonaria suma en diversas monedas. El dueño del establecimiento, de nacionalidad china, fue detenido.
San Martín de los Andes fue escenario de un impactante allanamiento este fin de semana, cuando las fuerzas de seguridad irrumpieron en un supermercado y descubrieron una presunta red de trata de personas. En el operativo, que tuvo lugar en el establecimiento ubicado en la calle 3 de Caballería al 650, se rescataron a siete personas de diversas nacionalidades que eran obligadas a vivir y trabajar en el lugar bajo condiciones deplorables.
El allanamiento fue llevado a cabo por personal de la Prefectura Naval Argentina (PNA) bajo la supervisión del juez federal Hugo García. Durante la intervención, no solo se liberó a las víctimas, sino que también se incautaron armas de fuego y municiones, evidenciando el potencial peligro al que estaban expuestas las personas rescatadas. Además, se confiscó una suma millonaria de dinero en efectivo, compuesta por pesos argentinos, chilenos, dólares y yuanes, totalizando un valor que superaba los 110.000.000 de pesos.
Según los testimonios recogidos por el Centro de Atención a la Víctima de San Martín de los Andes, las víctimas eran forzadas a vivir dentro del local comercial, en condiciones de vida extremadamente precarias.
El propietario del supermercado, de nacionalidad china, fue detenido inmediatamente. Está acusado de múltiples delitos, incluyendo trata de personas y posesión ilegal de armas. La investigación, que está siendo conducida por la justicia federal debido a la gravedad de los cargos, se centra ahora en desmantelar por completo la red de trata y asegurar que todas las personas involucradas enfrenten la justicia.
El descubrimiento de armas de fuego en el lugar agrega otra capa de complejidad al caso. Las autoridades incautaron tanto armas cortas como largas, junto con una variedad de proyectiles, lo que podría implicar al detenido en otros delitos graves relacionados con la seguridad pública.
Mientras tanto, las víctimas están recibiendo atención y apoyo para su recuperación física y emocional.