Tras 10 horas de tensión en el barrio Tres de Febrero, la toma de rehén que tuvo en el medio más de 300 disparos, finalizó de la peor manera: tanto el secuestrador como su víctima terminaron muertos.
Según detallaron fuentes policiales, el hombre fue abatido por el personal policial, mientras que al ingresar al hogar observaron que su amigo -a quien mantenía secuestrado- estaba fallecido.
Todo comenzó cuando el agresor de 42 años estaba junto a su pareja cenando en la casa de unos amigos. En ese momento se inició una discusión, por la cual tomó del cuello a su mujer. El resto de los presentes se dieron a la fuga, inclusive la pareja del agresor, quedando finalmente en el lugar un amigo de él.
Al arribar la policía al lugar, el hombre no depuso su posición y comenzó a disparar varios tiros con una escopeta. El Grupo Halcón de la Policía bonaerense intervino en el hecho. Hay tres policías heridos.