Imputarán a los padres de Zumara por la muerte de la niña

TRELEW - Según lo comunicó días atrás, el fiscal general Fabián Moyano estaría convencido de que la criatura murió ahogada al caer a un canal de riego, en el que no encontraron ninguna señal de ella cuando fue recorrido durante casi un mes por la Policía, los bomberos, personal de Defensa Civil y vecinos que, en solidaridad hacia los padres de Zumara, también salieron en su búsqueda.

El fiscal imagina que de ese canal, el cuerpo fue extraído por unos perros hambrientos que le seccionaron las partes que le faltaban al momento de ser hallado entre unos matorrales, en una chacra cercana al lugar en donde la nenita había desaparecido. El cadáver fue luego hallado desmembrado, unos cincuenta días después de que Zumara se le perdiera a sus papas, en un dramático hecho del cual se cumplirán dos años el próximo 30 de noviembre.

Los padres siempre habían manifestado que a la chiquita “la mataron” y el abogado que los patrocina, Javier Reuter, le había solicitado al fiscal Moyano, durante el último año, una sucesión de diligencias para investigar un eventual crimen en medio de un intento de violación, pero el Fiscal nunca hizo lugar a las peticiones del letrado.

Según el abogado, siempre se las rechazó “sin ninguna explicación”.

¿CASO CERRADO?

En lo que parecería ser la intención de cerrar finalmente la investigación y archivar el expediente, la Justicia le atribuye la responsabilidad de la muerte a los propios padres de la criatura, al matrimonio de Alejandra Valenzuela y Marcial Orias, y la imputación tendría lugar en una audiencia que se celebrará este lunes, a partir de las nueve y media de la mañana, en la Oficina Judicial de Trelew.

En dicha ocasión, será el juez Marcelo Nieto di Biasse, el mismo magistrado que avaló la actuación de Moyano y rechazó la denuncia en su contra por mal desempeño, quien deberá autorizar o no la apertura de una investigación penal en contra de los denunciantes del Fiscal, los padres de Zumara.

Por su parte, el abogado del matrimonio ya anticipó que se opondrá al pedido de la parte acusadora y que, en caso de ser necesario, irá hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación para plantear allí lo que él considera un “sinsentido”, o bien una “venganza” por parte del Fiscal de la causa.

ENTRE CULPAS Y RESPONSABILIDADES

Zumara Berenice Orias desapareció el 30 de noviembre del 2014, cuando su familia se encontraba almorzando en una chacra ubicada a pocos kilómetros de la ciudad de Trelew, lugar que se encuentra a pocos metros del río Chubut y de un canal de riego. Allí comenzó la búsqueda de la nena y, posteriormente al hallazgo de su cuerpo, la investigación de su muerte, presumiendo que la misma podría haber caído en las aguas de uno de los canales de riego que por allí pasaban.

Los restos de Zumara aparecieron un mes y medio después, el 22 de enero de 2015, en una zona de pastizales y árboles de la chacra 112 de Trelew, a unos 500 metros aproximadamente del lugar donde dijeron haberla visto por última vez sus padres.

A principios de junio, la fiscal jefe de dicha ciudad, Silvia Pereira, confirmó al fiscal general Fabián Moyano al frente de la investigación por la muerte de Zumara, luego de que el abogado que patrocina a la familia de la pequeña hubiera pedido, ante el juez de garantías Marcelo Nieto De Biase, el apartamiento de Moyano, derivando este la decisión a la fiscal Pereira. Reuter había cuestionado al Fiscal de la causa por “incumplimiento de los deberes de funcionario público”, al considerar que no había permitido la incorporación de nuevas pruebas sobre el hecho.

Con el hallazgo del cuerpo de la niña, se habían realizado diferentes estudios en varios organismos, entre ellos las pericias realizadas en un fémur de la menor, donde se hallaron restos de plancton iguales a los existentes en el canal de riego, indicativos de que la niña tragó agua del lugar, estando aún con vida, y en declaraciones a medios, la fiscal Pereira recientemente se refirió al trabajo de Moyano, argumentando que el mismo es “objetivo” y no persigue intenciones de “venganza”, tal como lo había planteado el defensor de los padres de la niña.

Fuente: El Diario de Madryn