Intentó robar en un kiosco y terminó detenido porque se entretuvo comiendo un salame
Mientras cometía el delito, al joven de 19 años le dio hambre y se puso a comer el embutido. Sin embargo le dio tiempo a los efectivos policiales para que llegaran al lugar y no pudo escapar.
El insólito hecho ocurrió en un comercio ubicado en la esquina de Avenida San Martín y Barboza, en la localidad de Media Agua, Santa Juan. Allí, un joven quedó detenido por una acción insólita.
El delincuente entró a robar pero mientras cometía el delito le dio hambre y se entretuvo comiendo salame, lo que le dio tiempo a la Policía para que llegara al lugar. Sin tiempo de poder escapar, finalmente terminó detenido.
El ladrón fue descubierto por un vigilador privado de un centro comercial que pasaba por la zona. El hombre no sólo notó que uno de los vidrios del lugar estaba roto, sino que también escuchó ruidos en el interior y le dio aviso al personal policial de la Comunal de Sarmiento, que se acercó rápidamente al local junto a los uniformados de la Comisaría Octava.
Tras ingresar al local, encontraron distintos productos embalados, entre ellos pudieron contarse cajas de cigarrillos, una notebook y un parlante.
Sin embargo, lo que más llamó la atención de los agentes de seguridad fue el hallazgo de cuatro piezas de fiambres tiradas en el suelo, mientras que una quinta, según informó la prensa de San Juan, era una pieza de salame que presentaba mordiscos.
El imputado, quien tendría antecedentes delictivos, quedó detenido acusado del delito de “robo agravado por escalamiento en grado de tentativa”.