Le dispararon a quemarropa cerca del corazón y se salvó
Ocurrió en Comodoro.
COMODORO RIVADAVIA - Un individuo de 24 años con antecedentes por atentados contra la propiedad ampliamente conocido en diversos sectores del barrio Máximo Abásolo, salvó milagrosamente su vida ya que le efectuaron un disparo a quemarropa que le dio de lleno en el intercostal izquierdo y pasó a centímetros de su corazón y de milagro tampoco le afectó otras arterias vitales.
Igual hay que esperar 72 horas para saber su evolución ya que podría complicarse.
Según informaron fuentes policiales de la Seccional Séptima, tomaron conocimiento del hecho a eso de las 0:55 de ayer cuando desde un domicilio de calle Los Plátanos al 4.300, unos vecinos informaron que minutos antes había llegado un joven herido de bala pidiendo auxilio y que lo querían matar, y que debieron trasladarlo de urgencia en un vehículo particular hacia el Hospital Regional.
POLICÍAS AL HOSPITAL
Hacia el nosocomio público se dirigió entonces una comisión policial que se encargó de identificar al herido de bala como Alan Antimán, de 24 años, vastamente conocido por sus andanzas, y que la herida de bala había pasado a centímetros de su corazón, por lo que resultaba milagroso que estuviera lúcido y -a la vista- sin lesiones en arterias vitales que pusieran en riesgo su vida.
El malherido en cuestión y en un momento de lucidez, no quiso aportar mayores datos sobre las circunstancias en que le dispararon, quedando la hipótesis de un posible ajuste de cuentas o bien de alguna persona que pudo haberlo sorprendido en un estado de sospecha ilícita.
De todas maneras se le dio intervención a la Brigada de Investigaciones para ahondar aún más en el tema y ya en las primeras horas de la tarde habían logrado identificar al autor del disparo y cerca de las 20 se preparaban para realizar un allanamiento en un domicilio de las calles Adela Small y Gansos verdes, parte alta del barrio Máximo Abásolo.
La orden judicial era detener al autor del hecho y, eventualmente, secuestrar el arma de fuego empleada en la agresión. Fuente: Crónica