El operativo fue llevado a cabo por la Brigada Rural de la Policía de Río Negro, que detectó una camioneta Ford circulando de manera sospechosa en la zona de Chasicó. Al detener el vehículo, los efectivos descubrieron dos corderos y más de 150 kilos de carne vacuna, que eran transportados sin refrigeración ni autorización legal.
Los ocupantes de la camioneta, dos hombres con domicilio en Cipolletti, no contaban con los permisos necesarios para el traslado de la carne, incumpliendo las normativas de salubridad y violando la Ley de Fauna Silvestre 22.241. Esta legislación regula la protección y aprovechamiento racional de la fauna en el territorio argentino y prohíbe la caza y comercialización de animales sin autorización.
Una vez confirmada la infracción, la Policía solicitó la intervención del personal de la Secretaría de Ganadería, que procedió al decomiso y destrucción de la mercadería. Los responsables también recibieron infracciones administrativas por el transporte ilegal.
Transportaba carne en condiciones inadecuadas y les secuestraron la mercadería saliendo de Comodoro
La carga no solo violaba la ley de protección de fauna, sino que representaba un riesgo sanitario al ser trasladada en un vehículo sin las condiciones de refrigeración necesarias. Este tipo de prácticas clandestinas no solo ponen en peligro la salud pública, sino que también afectan el equilibrio ecológico y fomentan el comercio ilegal de carne.