Macabro: invitó a un amigo a comer un asado, lo mató y lo prendió fuego en el patio
Un vecino vio los pies de un hombre sobresaliendo de las llamas de la fogata y alertó a la policía.
MISIONES - Arnaldo José “Roger” Sanabria (39) era un viejo conocido de la División Homicidios de la Policía de Misiones. En 2002 lo condenaron por matar a otro hombre. En 2015 lo apresaron por dispararle a otro joven después de un partido de fútbol barrial. Así, la cárcel volvió a convertirse en su hogar durante cuatro años. Y ahora quedó nuevamente detenido por un hecho aberrante: invitó a un amigo a comer un asado, lo mató y prendió fuego el cuerpo en el patio de su casa.
El hecho ocurrió en el barrio Cruz del Sur, en la zona periférica de Posadas. Fue descubierto por un vecino que pasaba por el lugar y divisó los pies de la víctima que sobresalían de la enorme fogata que el dueño de la propiedad había encendido con maderas y neumáticos en desuso.
Por unas horas, Sanabria no logró su objetivo de borrar todas las evidencias del crimen. Es que el fuego ya había consumido gran parte del cuerpo cuando los agentes irrumpieron en el lugar. El homicida intentó escapar en una moto, pero fue interceptado y detenido inmediatamente.
Policías de la Seccional 19° y de la División Homicidios, que trabajan en el caso junto al juez de Instrucción Fernando Verón, avanzaron rápidamente en las últimas horas y todas las pruebas e indicios apuntan a Sanabria como único autor del crimen, aunque todavía no está muy claro el motivo.
Será un examen de ADN el que determinará con certeza la identidad de la víctima. No obstante, desde la Policía dijeron que sería Ramón Alberto Giménez, de 42 años, domiciliado en el barrio Tacurú de la capital misionera.
Los agentes establecieron que el lunes a la tarde Sanabria pasó por la casa de Giménez y lo invitó para comer un asado y compartir vino en su domicilio, en inmediaciones del puerto de Posadas. Sin sospechar nada, el hombre accedió y en la vivienda de Sanabria fueron varios los que se juntaron para compartir la cena.
Al menos hasta la medianoche todo transcurrió con normalidad. A esa hora se retiraron algunos comensales y una hijastra del dueño de casa se retiró a descansar junto a su hijo.
Cuando ambos quedaron solos en el patio, compartiendo los últimos vinos, se habría producido el crimen. Por el estado en que se hallaba el cuerpo -sólo se rescataron las extremidades inferiores y parte de la columna-, se estima que el homicidio ocurrió durante la madrugada y Sanabria inició la fogata en el patio de su casa antes del amanecer. Para ello utilizó neumáticos en desuso y tablas.
Un vecino que pasó por el lugar a las 8 vio la enorme hoguera y los pies de la víctima, pero recién a las 11 alertó a la Policía, cuando se topó con una patrulla que llegó a la zona a raíz de una denuncia por abigeato. El hombre contó que Sanabria -había llegado hace poco tiempo al barrio- miraba el fuego mientras seguía consumiendo vino bajo la sombra de un árbol.
Los investigadores creen que Giménez fue atacado a golpes y rematado con un pisón, un elemento utilizado para apisonar la tierra o los escombros que se usarán para contrapiso. Sobre ese elemento se hallaron restos de sangre. Además, en la vivienda se decomisó una escopeta y varios envases tetrabrik de vino vacíos.
Fuente: Clarín