RAWSON - Desde el centro de detención donde se encuentra alojado desde que fue aprehendido por la muerte del adolescente de Rawson, el único condenado por el hecho -su hijo fue absuelto- ratificó los dichos en una de las últimas audiencias del caso. También dijo que está a la espera de una apelación.

Oscar Naya está preso desde hace 22 meses condenado por la muerte del joven Emmanuel Puebla Pires, sucedida el 9 de diciembre de 2014 en el paraje El Sombrerito, distante a 7 kilómetros al norte de Playa Unión.

Detenido en la Alcaidía Policial de Trelew, recibió a Jornada y tras dar su versión de los hechos de aquel fatídico día, enfatizó que “lamentablemente fue un accidente” y que “yo no fui el que disparó”, lo que dejó un manto de duda sobre si el autor de los disparos fue él o su hijo, Eduardo, hoy absuelto al cambiarse la tipificación del delito de homicidio con dolo eventual a culposo.

RESPUESTAS

A la espera de una respuesta de una apelación por parte de la Justicia para ir a ver a su madre convaleciente de salud en una clínica médica y también a la definición del Superior Tribunal de Justicia sobre el recurso presentado por el abogado querellante de la familia Pires para el cambio de carátula del hecho, Naya sostuvo que no pretende “volver a insistir sobre cómo se sucedieron los hechos que llevaron a la muerte del joven Emmanuel, pero hubo muchas irregularidades; como por ejemplo el procedimiento policial relacionado al secuestro de la camioneta en que íbamos Eduardo y yo o la pericia genética que nos sacaron”.

En la requisa de la camioneta, dijo que el procedimiento se realizó sin ninguna orden judicial destacando además que no se daban los dos requisitos que hubiesen permitido obviar esa orden, en alusión a la “necesidad de extrema urgencia de la medida” o de “riesgo para las personas”. En el otro paso, “los doctores Néstor Basso y Liza Martinazzo hablan que el arma poseía ADN de, al menos, tres personas y que no se abordó como correspondía en el juicio y sólo se pasó lectura de ese informe”.

"YO NO FUI"

“Además –agregó- yo jamás dije que había disparado. Lo que yo expresé en su momento a la fiscal Graciela Suárez García era que me hacía responsable de lo que estaba pasando, básicamente por un gesto paternalista. Pero debo decir que la muerte de Emmanuel fue, lamentablemente, un accidente y que yo no fui el que efectuó los disparos”.

Ante la consulta sobre si su negación en el manejo del arma en cuestión involucra directamente a su hijo Eduardo; Oscar Naya precisó: “Que cada uno saque sus propias conclusiones. Así como otras personas involucradas en esta tragedia sostuvieron enfáticamente sobre quién fue el autor de los disparos; que otros también fijen sus propias interpretaciones de los hechos que terminaron con la vida de Emmanuel”.

Es importante destacar que en noviembre del año pasado, en una audiencia en los tribunales de Trelew, Oscar Naya ya había expresado que él no había disparado el arma y que no se iba a “flagelar” diciendo ello. Ayer, ratificó esa postura.

Oscar Naya, de 65 años, está condenado a 4 años de prisión y alojado en la Alcaidía trelewense, pero si su condena no queda firme, puede quedar en libertad al cumplirse la mitad de la pena. En todo caso, si el Superior Tribunal de Justicia confirma la resolución de la Cámara de Apelaciones, saldrá el año que viene.

Oscar Naya fue condenado -en primera instancia- a 10 años de prisión por homicidio con dolo eventual. Tras dos apelaciones, la Cámara se lo redujo a 4 años, pero por homicidio culposo.

Fuente: Jornada

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