Presos y a juicio oral por asaltar y matar a un comerciante
El hecho ocurrió en enero pasado en Tienda Rodrigo.
COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - Este jueves se concretó en los tribunales penales ordinarios la audiencia de revisión de la prisión preventiva y también la audiencia preliminar por el hecho ocurrido el pasado 20 de enero de 2017 que tiene como imputados a Enzo Martín Uranga y Lautaro Hernández y como víctima mortal a John Blas Gutiérrez.
El funcionario de fiscalía ratificó la acusación presentada y solicitó se mantenga la prisión preventiva sobre ambos imputados hasta el juicio. El defensor de Hernández planteó su sobreseimiento y solicitó su libertad con presentaciones; en tanto que el de Uranga objetó la calificación jurídica esgrimida por el acusador público y dijo que no corresponde el dictado de una medida de coerción. Finalmente la jueza penal resolvió elevar la causa a juicio y mantener la prisión preventiva de ambos por el término de 40 días.
Presidió el acto Gladys Olavarría, jueza penal; por el Ministerio Público Fiscal se hizo presente Cristian Olazabal, funcionario de fiscalía; la defensa de Hernández fue ejercida por Mauro Fonteñez, abogado particular; en tanto que la de Uranga por Ricardo Amado, abogado adjunto de la Defensa Pública.
El funcionario solicitó se eleve la causa a juicio por el hecho acontecido el pasado 20 de enero de 2017 cuando, Enzo Martín Uranga y Lautaro Hernández cometieron un primer robo alrededor de las 18.00hs., en un negocio de la calle C. Campoy. al 2600. Ingresaron pateado una puerta, tomaron dos botellas de Dr. Lemon y se dieron a la fuga. La propietaria alcanzó a verlos cuando se iban, observando que uno de ellos llevaba un arma en la cintura.
Dos horas después, las mismas personas entraron a la "Tienda Rodrigo", distante a escasos metros. Actuaron como clientes comunes, se probaron ropa y calzado, y una vez con las prendas se dirigieron a la caja donde estaban el propietario del local, su esposa y su hijo John. Uranga extrajo el arma de fuego diciendo “esto es un asalto” exigiendo la entrega de "toda la plata". La mujer le dijo que no tenían dinero y el imputado disparó al dueño del local en el muslo izquierdo y a John en el pecho. Inmediatamente Uranga y Hernández se dieron a la fuga con las prendas robadas. Inmediatamente la víctima, John Blas Gutiérrez, es trasladado al Hospital donde fallece.
Calificando jurídicamente el hecho como “homicidio en ocasión de robo, en concurso ideal con robo agravado por el uso de arma de fuego, en concurso real con robo simple”. Estimándose una pretensión punitiva, en caso de recaer condena, para Uranga de 20 años de prisión, ya que tiene antecedentes penales; y de 15 años para Hernández por carecer de ellos.
Olazabal solicitó se mantenga la prisión preventiva que vienen cumpliendo ambos imputados hasta la celebración del juicio oral y público en base a la probabilidad de autoría de ambos en el ilícito. Por las características graves del hecho, la violencia física desmedida y el uso de un arma de fuego. Finalmente se refirió a la existencia de los peligros procesales de fuga y entorpecimiento.
DEFENSOR
Seguidamente el defensor de Uranga objetó la calificación legal esgrimida y sostuvo que no debe ser aplicado el concurso ideal de robo agravado por el uso de arma de fuego. También criticó el dictado de la prisión preventiva basado en la expectativa de pena alta ya que ello no basta para derribar la presunción de inocencia. Ésta solo es revertida por una sentencia firme, aseguró. La medida de coerción debe tener un plazo y no puede ser establecida con un plazo abierto. Concluyendo que no corresponde el mantenimiento de la prisión preventiva de su pupilo.
En igual sentido el defensor de Hernández contestó la acusación fiscal, propició su sobreseimiento y objetó también la calificación legal. Sostuvo que no hubo un plan previo y que su defendido no tuvo voluntad de cometer el delito. Negando la existencia de los peligros procesales de fuga y entorpecimiento y requiriendo su libertad con presentaciones semanales y subsidiariamente su arresto domiciliario.
Finalmente la jueza penal, Gladys Olavarría, resolvió elevar la causa a juicio oral y público bajo la calificación legal de “homicidio en ocasión de robo, en concurso real con robo simple”, en calidad de coautores para Uranga y Hernández. Dictando la prisión preventiva de ambos imputados por el término de 40 días, en base a la existencia del peligro de entorpecimiento ya que es necesario cautelar los testigos que depondrán en el juicio.