COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR / INFORME ESPECIAL) - La Sala 1 de la Cámara Criminal y Correccional Federal confirmó los procesamientos de Cristóbal López, Carlos Fabián De Sousa y Liza Fabiana Garay. Les imputan lavado de activos por dos operaciones de compra-venta de tierras ganadas al mar en Comodoro Rivadavia, según el fallo al que tuvo acceso ADNSUR. 

Los dos primeros fueron embargados en 30 millones de pesos y la última, por 5 millones. También quedaron procesados Jorge Bringas y Lázaro Báez. El primero fue embargado en $ 15 millones y el segundo, en $ 30 millones. Todos fueron imputados como autores excepto Garay, partícipe necesaria. Alejandro Rodríguez recibió la falta de mérito. 

Al fallo lo firmaron Leopoldo Bruglia, Mariano Llorens y Pablo Bertuzzi. La Unidad de Investigación Financiera es querellante y pidió las confirmaciones, según confirmaron fuentes a ADNSUR.

La causa se concentra en dos operaciones sospechadas de introducir en el mercado dinero proveniente de un ilícito penal, concertando un precio por un lote “sustancialmente por encima” de su valor real.

Por un lado, la cesión de derechos acordada en junio de 2014 entre Servicio Integral Alem SRL (propiedad de Lázaro Báez) e Inversora M&S SA (Grupo Índalo), respecto del inmueble lote 2, manzana 61 A, en el sector de tierras ganadas al mar, de Comodoro, por U$S 1.000.000.

Por otro lado, la cesión de derechos sobre el mismo bien, esta vez entre Inversora M&S y Banco Finansur, aprobada en setiembre del mismo año, por U$S 2.000.000.

En cuanto a la primera cesión, la “asimetría” entre el valor real y el precio acordado por Servicio Integral e Inversora M&S surge del expediente de la Municipalidad y de la valuación de la Dirección General de Catastro en 2014. El valor del inmueble sería de $ 1.761.100 a diciembre de 2011, unos U$S 413.400 según la cotización del dólar en aquel momento.

Esta venta se trató en reunión de directorio de Servicio Integral de abril de 2014 (único punto del orden del día), en la que intervinieron Báez y Bringas. 

Éste último -socio gerente- manifestó el interés de la sociedad en obtener fondos con la operación y propuso buscar interesados. Del otro lado la compradora, Inversora M&S, aprobó la operación en mayo de 2014. La operación debía habilitarla el municipio. 

El directorio aprobó el acuerdo de cesión por U$S 1.000.000: U$S 600.000 al firmar el boleto y U$S 400.000 a 6 meses del acto o cuando la Municipalidad otorgara el título de propiedad. El boleto entre Servicio Integral -representada por Bringas- e Inversora M&S se suscribió el 11-06-2014.

Tres meses después la cesión por parte de la empresa de Báez, Inversora M&S SA a su vez cedió los derechos del lote al Banco Finansur, del Grupo Indalo. Esta vez sería por U$S 2.000.000. 

Otros tiempos. Cristobal López y Lázaro Báez fueron dos de los grandes empresarios de la obra pública.

LAS NEGOCIACIONES

La reunión de directorio que aprobó esta segunda operación fue en setiembre de 2014. El presidente del órgano -Cristóbal López- informó sobre las negociaciones con el Banco: la sociedad gestionaría ante la Municipalidad que el inmueble fuera escriturado directamente a nombre de Finansur. Al acta la firman las mismas personas que en los casos anteriores: López, De Sousa y Garay como directores y Rodríguez, como presidente de la Comisión Fiscalizadora. 

“Se aprecia con mayor nitidez que en la primera operación el exceso en el precio de la cesión, el cual duplicaba el importe convenido sólo tres meses atrás”.

Las defensas argumentaron que iban a construir en el lugar. “No permite justificar tal incremento, puesto que el tiempo mínimo que demandaría la edificación no se condice con el vertiginoso tratamiento y aprobación de la cesión. Inversora M&S aprobó primero la cesión en favor del Banco (19-09-2014) y recién tres meses más tarde efectuó una presentación en la Municipalidad con la intención de construir un edificio”. 

Para los camaristas, “las operaciones analizadas se habrían pactado por un precio ampliamente superior al valor real del inmueble”.

Otro dato es que los derechos sobre el lote eran reclamados de anteriores cesionarios -Fernando Cosentino y Enrique García-, que tuvieron fallos favorables. “Esta circunstancia, que constaba en el expediente municipal, debía incidir negativamente en el valor de venta, aunque de hecho sucedió todo lo contrario”.

Esto explicaría que la cesión de Inversora M&S al Banco no se haya escriturado. Cosentino y García presentaron fallos de la Cámara de Apelaciones de Comodoro y del Superior Tribunal de Justicia y solicitaron a la Municipalidad invalidar la adjudicación del lote a Inversora M&S SA. Un oficio del Juzgado Civil y Comercial N° 1 ordenó al municipio no traspasar la propiedad a nadie hasta terminar las actuaciones judiciales.

SUPUESTO LAVADO

La cesión de derechos entre Servicios Integral Alem SRL, del Grupo Báez, e Inversora M&S SA, de López y De Sousa, le habría servido al primero para “blanquear” dinero; la segunda operatoria, entre la última firma y Banco Finansur les habría permitido hacer lo propio a los dueños de dicho conglomerado económico. 

Para la primera operación, el dinero habría salido de una serie de actos defraudatorios en la obra pública vial de Santa Cruz entre 2003 y 2015, enmarcados en un acuerdo de Báez con el entonces presidente Kirchner, para apoderarse de fondos públicos. Por ese suceso Báez está procesado.

Para la segunda operatoria, el origen ilícito de los bienes a blanquear es la presunta defraudación al fisco cometida por López y De Sousa a través de Oil Combustibles SA y otras empresas del Grupo Indalo, entre 2013 y 2015. La plata del Impuesto sobre los Combustibles Líquidos que dicha firma percibía de los consumidores, en lugar de ingresar al fisco se usaban para financiar el funcionamiento y la expansión de dicho conglomerado empresario a través de las sociedades accionistas de Oil: Inversora M&S SA y Oil M&S SA, valiéndose de sucesivos planes de facilidades de pago otorgados irregularmente por la AFIP.  En esta causa, López y De Sousa están procesados.

“El dinero deja de ser blanco cuando pasa a la esfera de custodia del sujeto activo en cantidades sustancialmente más elevadas que la ganancia esperada o normal correspondiente a su actividad”, dijeron los jueces. 

Y agregaron: “la operatoria tuvo por fin justificar el ingreso de una parte de esos activos al patrimonio de Inversora M&S SA, firma accionista de Oil Combustibles”.

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