Un incidente de discriminación en Cipolletti resultó en la condena de un chofer de colectivo de la línea interurbana. La jueza de Paz determinó una multa significativa al conductor por su trato despectivo hacia una persona con discapacidad, refiriéndose de manera inapropiada al certificado único de discapacidad (CUD).

El suceso ocurrió el 19 de julio de 2023 cuando una madre y su hija abordaron un colectivo de la empresa Ko Ko. Según la denuncia, el chofer les exigió de manera despectiva el CUD, el documento nacional de identidad y la partida de nacimiento. Esta conducta se repitió en varias ocasiones, según los relatos de las denunciantes.

El caso fue tratado como una contravención, y inicialmente, la jueza emitió una medida cautelar para detener los actos de violencia. El proceso continuó y se convirtió en uno de los primeros juicios contravencionales desde la implementación del nuevo código en 2022.

Durante el juicio, el chofer estuvo representado por una abogada particular, mientras que la denunciante contó con la defensa pública civil de Cipolletti. Se presentaron pruebas y testimonios que confirmaron el comportamiento inapropiado del chofer, aunque no todos los detalles de la denuncia fueron corroborados.

La defensa del imputado argumentó que el chofer solo seguía las normas de la empresa y no recordaba ningún altercado específico con las denunciantes. Sin embargo, los testimonios de otros pasajeros confirmaron el trato discriminatorio del conductor.

El fallo subrayó la obligación de los Estados de garantizar el acceso al transporte en igualdad de condiciones para las personas con discapacidad, según la Convención sobre los Derechos de Personas con Discapacidad. La jueza destacó la importancia de respetar y promover la igualdad en el acceso a servicios públicos como el transporte.

El chofer fue condenado a pagar una multa de 117.157 pesos (100 UM) por la contravención estipulada en el artículo 40 inciso c) que reprime los actos de discriminación. Además, se aplicó una agravante debido a que la víctima era una persona con discapacidad. Se acreditó que el trabajador de la empresa se refirió al certificado de discapacidad de manera vergonzante.

El chofer fue absuelto de la acusación de agresión en la vía pública debido a la falta de pruebas suficientes de una agresión física que generara un peligro concreto de lesión. La multa impuesta deberá ser depositada en la cuenta de la Asociación Cooperadora Hospital Pedro Moguillansky.

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