CALETA OLIVIA (ADNSUR) - Un importante operativo policial se desplegó tras la alarma de lo que fue una escena de violencia frustrada. Finalmente sin denuncias, en la noche del miércoles la Policía acudió a un pedido de socorro por una presunta toma de rehén y amenaza de daño físico. Todo quedó en manos de la Comisaría de la Mujer y la Familia de Caleta Olivia.

Foto: La Opinión Austral

Desde el exterior de una vivienda ubicada en inmediaciones de las calles San José Obrero y Hermana Dámevin de la ciudad de Caleta Olivia, al promediar la hora 21 se podía escuchar el griterío que alertó a vecinos y transeúntes. Sólo 15 minutos más tarde, quien sería un miembro de la familia en cuestión llamó a la Seccional Primera de Policía.

Una comisión de la mencionada dependencia acudió al requerimiento y uno de los agentes se asomó por una ventana que daba a calle, percatándose de la presencia de un hombre joven, de alrededor de 25 años de edad, que sostenía en uno de sus brazos a una beba y en la otra mano tenía un arma blanca. La visión evidenció peligrosidad y el pedido de ayuda motivó la presencia de otras dependencias policiales que cerraron el área en torno a la vivienda.

Una de las instituciones de las fuerzas de seguridad que asistió fue la Comisaría de la Mujer y la Familia. Mientras adentro se desarrollaba la escena y afuera se preparaban medidas de contención, familiares del hombre y la beba permitieron que los efectivos ingresaran. Uno de los oficiales que acudió fue el comisario Bordón, a cargo de la Seccional Primera. Ante su presencia, los ánimos se calmaron.

Tras una larga conversación con un negociador, el hombre, que sería de apellido Igor, depuso su actitud. Entregó a la beba y el arma para quedar a disposición de las autoridades.

SIN DENUNCIA

Los familiares del joven decidieron no realizar las exposiciones de rigor, pese a la peligrosa situación vivida. Por tal motivo, las actuaciones correspondientes quedaron en manos de la Comisaría de la Mujer, generándose antecedentes que llegarán al Juzgado de Familia de la ciudad. El caso se suma así a los relacionados con escenas de violencia en el seno familiar.

Hasta el momento se desconocen las causas que llevaron al joven a atrincherarse en la vivienda junto a la nena aunque, extraoficialmente, según pudo saber La Opinión Austral, se trataría de una pelea por la tenencia de la menor. 

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