Usaron 300 kilos de explosivos para demoler un "aguantadero" en Neuquén
Lo demolieron en la ciudad de Cutral Co. Los vecinos señalaban la mole como refugio de delincuentes.
NEUQUÉN - Los vecinos lo señalaban como refugio de delincuentes y el esqueleto de cemento que metía miedo ya no existe. Este jueves fue demolido mediante una implosión el "edificio aguantadero" de Cutral Co, en Neuquén, poco más de un mes después del crimen de un nene de ocho años que recibió un balazo en la cabeza al quedar en medio de un enfrentamiento entre bandas de narcotraficantes.
Usaron unos 300 kilos de explosivos colocados en las columnas de la estructura para derribar el bloque C 9 del barrio Belgrano (ex 450 Viviendas), que estaba deshabitado y completamente desmantelado. Para el operativo, del que participaron unas 400 personas, evacuaron la zona y colocaron un anillo de mallas destinado a contener los trozos de mampostería que podían desprenderse hacia los laterales, consignó el Diario de Río Negro.
La impresionante detonación fue simultánea en toda la estructura, que desapareció en segundos en medio de una nube de polvo. Mientras filmaban el momento, decenas de vecinos aplaudieron aliviados por el final de un foco de inseguridad.
La estadística del barrio Belgrano, de Cutral Co, es brutal: en los últimos dos años entre sus nueve monoblocks que albergan unas 2.000 personas se han registrado cerca de 20 asesinatos.
El 7 de octubre, uno de los tantos hechos de inseguridad hizo que la gente saliera a la calle para decir basta: Luciano Fuente, de ocho años, estaba en la vereda de su casa con su bicicleta y recibió un balazo. Fue víctima de un enfrentamiento entre dos bandas de narcotraficantes que ocurrió a pocos metros de donde jugaba. Lo trasladaron malherido al hospital Castro Rendón, de Neuquén, donde murió minutos después de ingresar.
Hubo cortes de la ruta 22 a la altura de Plaza Huincul como protesta y entre las medidas contra el delito que se acordaron con el Municipio y la Provincia, estaba la demolición de la mole de tres pisos que los delincuentes usaban para esconderse.
Por el asesinato hay un detenido con prisión preventiva bajo la imputación de homicidio agravado por el uso de arma de fuego en calidad de autor, pero la investigación se complicó por el temor de los vecinos a sufrir represalias si se presentan como testigos.
