¿Chubut y Santa Cruz se quedan solas para discutir con las cámaras?

COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR/EL ANÁLISIS DE LA NOTICIA) - La  decisión de Chubut y Santa Cruz para mantener el paro por 48 horas y dejar latente la posibilidad de una nueva protesta por 72 horas, con la perspectiva de prolongarse por tiempo indeterminado en caso de no lograr la garantía de estabilidad laboral, admite en principio dos lecturas, no contrapuestas, sino complementarias: Neuquén y otras provincias como Tierra del Fuego o Mendoza ya tienen certezas de que el tarifazo del gas posibilitará compensar con la producción de ese fluido la crisis del petróleo; y al mismo tiempo, el hecho de que las empresas petroleras prevén en su horizonte una profundización de la reducción de actividad en la cuenca San Jorge, de allí que se niegan a firmar la cláusula de garantía de estabilidad laboral exigida por los sindicatos de esta región.

La cuestión salarial parece haber quedado superada, al menos desde el punto de vista del sindicato petrolero Chubut. El 30% fijado en 3 tramos por el Ministerio de Trabajo de la Nación está más cercano al pedido que se hacía desde esta región que al “42%” que empezó pidiendo Neuquén, cuyo conductor Guillermo Pereyra terminó aceptando el aumento dispuesto por decreto, reduciendo el paro de 48 a 24 horas y mostrándose dispuesto a la discusión que se abrirá nuevamente este martes. La suma fija, que compensaría los meses transcurridos desde 2016, queda lejos de los 8.000 pesos que se estimaban por mes (quedando por discutir si abarcaría sólo uno o los dos trimestres transcurridos del corriente año), ya que la resolución ministerial establece 15.000 pesos como suma única para cubrir la primera parte del año.

Por su parte, Jorge Ávila exige no sólo la cuestión salarial, de la que había anticipado a ADNSur que “no estamos tan lejos”, sino fundamentalmente la garantía de que no habrá reducción de puestos laborales no sólo en lo que resta del año, sino extendiéndolo a todo 2017. En ese punto, el sector empresario se negó a firmar garantías, lo que estaría evidenciando que aún acordando la jornada de 8 horas (que posibilitará redistribuir personal para atenuar el impacto de las desvinculaciones) ésta no aportará las certezas que se buscan.

De lo anterior, la conclusión principal es que las operadoras apuntan a seguir reduciendo puestos laborales “sobrantes”, pese a que ya hubo avances en ese sentido y se estima en no menos de 2.000 las “desvinculaciones por goteo”.

La segunda conclusión posible es que Neuquén no acompañará la posición de la cuenca San Jorge, habida cuenta de que los problemas de esta región son diferentes a los de aquella cuenca: Guillermo Pereyra maneja la cuenca gasífera más rica del país, cuyos precios acaban de duplicarse, trasladando el mayor costo a los usuarios residenciales, al tiempo que los precios de los combustibles líquidos en todo el país siguen solventando el barril de crudo mejor cotizado del mundo, ya que los 67 dólares que recibe cada unidad del tipo Medanito bien puede ser la envidia de países árabes.

Mientras tanto, en Chubut las novedades no son alentadoras: la perforación de pozos no se ha reactivado como se prometió en noviembre, ni tampoco en abril cuando se firmó la segunda acta acuerdo, al tiempo que las expectativas del mediano plazo quedan demasiado lejos para las urgencias de la actualidad.

En ese contexto, la interna sindical, que debe dirimirse en elecciones en noviembre próximo, juega sus propias cartas y coloca a la conducción actual frente a una situación de exigencia mayor a la de sus pares de otras provincias.