Causa "El Embrujo": mientras se discute cómo paga la multa, la inflación juega a favor de Correa
Un tribunal debe resolver si acepta o no unos lotes en la zona cordillerana, pero el monto de la sentencia original, del año 2019, ya se desvalorizó hasta casi una décima parte de lo que era.
Diego Correa, el polémico ex secretario privado del gobernador Mario Das Neves, condenado por una serie de delitos que van desde lavado de activos hasta enriquecimiento ilícito, todavía debe abonar una multa de 27,3 millones de pesos, que se fijó al momento de su sentencia en la causa conocida como “El Embrujo”.
El abogado defensor del ex funcionario, Fabián Gabalachis, cuestionó que los fiscales no hayan aceptado aún el ofrecimiento de lotes en Lago Puelo para compensar el pago de la multa que adeuda Correa, por algo más de 27 millones de pesos.
Hay que recordar que tras ser condenado a 10 años de prisión, en octubre de 2019, por una serie de delitos que se le probaron como jefe de una asociación ilícita (enriquecimiento ilícito, defraudación al Estado, lavado de activos y negociaciones incompatibles con la función pública), Correa quedó en libertad condicional desde marzo de este año.
Sin embargo, tiene pendiente el pago de la multa, además de que espera confirmación en otras dos sentencias adversas. En la causa “Revelación” fue condenado a otros 5 años de prisión; y “Emergencia climática”, por otros 4 años de cárcel.
“Los fiscales han sido contradictorios –aseguró el abogado defensor, en diálogo con Actualidad 2.0-. Durante el juicio tuvieron éxito en probar que Correa usó una empresa (Dual Core) para perpetrar los delitos por los que fue condenado, pero ahora se niegan a reconocer que los terrenos que están a nombre de esa sociedad, sean propiedad de Correa”.
La controversia que debe resolverse es porque precisamente la defensa ofrece pagar la multa pendiente con lotes ubicados en Lago Puelo, que están escriturados a nombre de la sociedad, pero no de Diego Correa. Esto llevó a la fiscalía a oponerse que se acepte ese medio de pago, lo que fue ratificado por la jueza Karina Berkley, de allí que la defensa ha impugnado esa decisión y ahora un tribunal debe resolver si acepta o no los terrenos para pagar la deuda.
MIENTRAS TANTO, LA INFLACIÓN VA DEVALUANDO EL VALOR DE LA MULTA
Un dato curioso es que el monto que debe abonar el condenado es el mismo que se fijó al momento de la condena, hace 4 años atrás. Al no haber un sistema de actualización acorde a una economía inflacionaria como la que sufre el país, ese valor representa hoy una mínima parte de lo que era originalmente.
A modo de ejemplo, una simple estimación a través de una aplicación que mide la inflación acumulada permite determinar que el valor actualizado a octubre de 2023 representaría alrededor de 245 millones de pesos. Dicho de otro modo, el monto a pagar representa casi la décima parte de lo que debería abonar si hubiera un sistema de actualización por inflación.
“Nuestro Código Penal está basado en un código de Alemania, del año 1850 y no contempla un mecanismo de actualización –reconoció Gabalachis-. Es cierto que con el paso del tiempo la multa se va devaluando, pero los recursos que interpusimos no se hicieron con esa finalidad, sino para que se permita pagar con tierras que son de su propiedad y que hoy superan holgadamente el valor de la multa”.
Una vez que el tribunal resuelva, se verá si se acepta o no el modo de pago a través de las tierras. Según se había advertido en la instancia anterior, si no abona mediante otra vía, para lo que se piden bienes que el Estado pueda utilizar en la ciudad capital, comenzaría a regir un interés diario por mora, desde el momento de la aplicación de la sentencia.
Además de la multa, al ex funcionario se le decomisó una serie de bienes, producto de los delitos perpetrados y con los que se había enriquecido ilegalmente.
¿PUEDE VOLVER A PRISIÓN?
En septiembre, cuando la Corte confirmó la sentencia por el causa “El Embrujo”, el fiscal Alex Williams recordó que Correa todavía tiene pendiente la confirmación de las otras dos sentencias mencionadas, que también entrañan penas de prisión, por las que eventualmente podría volver a quedar detenido.
“Tiene dos condenas más, esperando ser cumplidas -había expresado el fiscal semanas atrás-. Cualquiera de esas causas quede firme, nos da la posibilidad de pasar a un siguiente paso, de hacer una unificación de pena, por lo que en forma proporcional debería volver a prisión. La libertad condicional, a la que nosotros nos opusimos, tiene serias chances de ser revertida”.
Gabalachis no compartió el mismo criterio y aseguró que “es bastante discutible que vuelva a ser detenido”, al afirmar que hay una regla del “concurso de delitos” que impide que la suma de penas supere el monto de la pena máxima, que en este caso ha sido de 10 años. De todos modos, será una discusión que se abrirá una vez que las sentencias queden firmes.