El 80% de la ampliación presupuestaria de Chubut proviene de regalías petroleras

COMODORO RIVADAVIA (Por Raúl Figueroa / Especial para ADNSUR) -  En los próximos días continuará la discusión en torno al presupuesto nacional de recursos 2019, cuyo análisis a medida que se profundiza va dejando en claro que la mayor parte de las variables “pierden” la carrera frente a la inflación de este año, a la que ya debe empezar a sumarse la proyectada para el año próximo.

Con poca expectativa de recibir obras de importancia, tanto desde el plano nacional como provincial, Comodoro Rivadavia sin embargo aparece, una vez más, en los primeros lugares de la lista de “aportantes” de recursos.

En rigor, hasta ahora sólo se conoce la obra de estación transformadora que, por un monto de 18 millones de dólares, o 700 millones de pesos, permitirá superar el “aislamiento” en que había quedado la ciudad frente al interconectado nacional, que pasa desde Puerto Madryn a Truncado, pero que requiere de este nodo para poder aprovechar el potencial de los parques eólicos que se montarán en la región.

No es un proyecto para subestimar, pero su importancia palidece cuando por otro lado nadie, ni aun quienes apoyan al actual gobierno nacional, puede asegurar hoy si habrá algún tipo de avance no sólo con obras de infraestructura largamente postergadas (por ambas orillas de “la grieta”, vale tenerlo presente), como la circunvalación vial de la ruta 3, sino al menos con la terminación de otras obras pendientes como la repotenciación del acueducto o la autovía Comodoro-Caleta Olivia, obras que permanecen en la nebulosa de los avatares judiciales de las empresas de Cristóbal López.

Nebulosa que, por acción u omisión, termina resultando funcional a un gobierno preocupado en afilar la tijera para cumplir metas frente al FMI.

EL APORTE DE CHUBUT Y LAS PRIORIDADES

También se ven relativizadas las proyecciones de incremento de transferencia de gastos corrientes a la provincia, que se elevan en un 36% para el 2019: casi 11.000 millones de pesos más llegarán en distintos conceptos a Chubut, pero los mismos vuelven a encogerse cuando se contrasta el porcentaje de incremento frente a la inflación que cerrará este año, que sumada a la proyectada para el 2019 podría totalizar un 60%.

Es interesante contrastar, al mismo tiempo, la cantidad de recursos que una vez más aportará la ciudad para la emergencia de la hora.

En materia de retenciones a la exportación, por ejemplo, el presupuesto nacional del año próximo contabilizará no menos de 11.000 millones de pesos (ó 275 millones de dólares) que provendrán de las exportaciones totales de Chubut, según estimaciones del consultor Daniel Ehnes.

Sobre ese total, algo más de la mitad provendrá de las retenciones al petróleo, según publicó ADNSUR días atrás, en base a una proyección de al menos 150 millones de dólares de retención sobre el crudo exportable de esta región.

En materia de asignaciones presupuestarias y las prioridades que éstas reflejan por parte del gobierno nacional, vale sumar otro indicador: en Neuquén celebran la asignación de una nueva partida anual, de 700 millones de dólares, para seguir subsidiando la producción shale de Vaca Muerta, cuya extracción de gas subsidiado ha crecido a tal punto que en verano sobrará gas y habrá que cerrar válvulas, porque tampoco hay aún una demanda de exportación suficiente para esa oferta.

Si alguien no entiende de presupuestos, de finanzas, de Lebacs, de Letes ni de Lelits, ni tampoco suele guardar ahorros en dólares, podría pensar, con lógica simple, que estas decisiones presupuestarias reflejan la decisión de restar recursos de una región para colocarlos en otra, sin que esa decisión redunde en un beneficio concreto (como podría ser, por ejemplo, la mayor incorporación de familias del país a redes de gas natural).

Y que los beneficios de aquella decisión (equilibrar la balanza comercial a través de la exportación futura de gas y petróleo) está muy lejos de las urgencias de hoy. Es probable que ese alguien, con demoledor sentido común, simplemente esté en lo cierto.

SUPERÁVIT PROVINCIAL

También a las cuentas provinciales, Comodoro hará nuevamente el aporte que corresponde por ley. Un dato ilustra la magnitud de esa importancia: casi el 80% de la ampliación presupuestaria que el gobierno provincial busca que Legislatura le apruebe, proviene de fondos generados por regalías petroleras.

Así se desprende de un análisis interno, al que esta columna tuvo acceso, realizado por asesores de los diputados que deben tratar el tema.

El dato en sí no es malo, ya que en definitiva significa un recurso genuino para afrontar mayores obligaciones: es bueno que la provincia pueda contar con casi 5.000 millones de pesos por encima de lo que había presupuestado, lo que le permitirá afrontar la totalidad del aumento de gastos previsto y quedar con un superávit de 296,5 millones de pesos.

El dato positivo, en suma, es que la provincia no tenga que salir a tomar más deuda para cubrir obligaciones. El inevitable dato negativo es que 40% del aumento del gasto se origina en su propia deuda externa, a partir de los efectos de la devaluación del peso frente al dólar.

Por otro lado, la importancia del aporte, al igual que el que hace ante Nación, vuelve a contrastar con la escasez de obras en marcha para esta ciudad: una ciudad que seguirá poniendo, como siempre, mientras pasan los años y las frustraciones se acumulan como el fango formado en cada lluvia que, cada vez con más frecuencia, nos supera en la sequía habitual.