El Gobierno minimizó el paro nacional de la CGT y aseguró que se transita "un cambio de época"
Luego de las medidas de fuerza llevadas a cabo este jueves en todo el país, el vocero presidencial, Manuel Adorni, se refirió al impacto que tuvo y dio por hecho que se trató de "un cúmulo de amenazas y extorsiones".
El Gobierno de Javier Milei logró bajar los niveles de confrontación con la oposición al aprobar la nueva Ley Bases en Diputados. Sin embargo, los sindicatos y movimientos sociales decidieron liderar un paro general en todo el país por 24 horas este jueves, convocado por la Confederación General del Trabajo.
La CGT convocó a su segunda medida de fuerza durante el gobierno de Milei. La primera tuvo lugar 45 días después de la asunción presidencial, mientras que esta se llevó a cabo a los cinco meses de gobierno. Durante este tiempo, no ha habido diálogo entre las partes, a pesar de algún intento inicial.
El paro es una medida que también se utiliza para meterle presión a los legisladores que actualmente se encuentran debatiendo el proyecto del Gobierno en el Senado. Se espera que en los próximos días se pueda elaborar un dictamen de la Ley Bases y que la semana que viene sea discutida en el recinto.
A horas de finalizar las medidas de fuerza, el vocero presidencial, Manuel Adorni, brindó declaraciones de lo ocurrido este 9 de mayo en todo el país y del impacto que tuvo. “El sindicalismo contribuyó a la destrucción del país porque son parte de la decadencia. No entienden que la sociedad decidió avanzar”, expresó en el canal Todo Noticias.
“Hay un cambio de época. Hay un rechazo transversal para estos personajes, de casi un 80%”, añadió, respecto del impacto y las repercusiones. “El Pacto de Mayo no debería ni discutirse, pero nos han hecho tanto daño que necesitamos decir que defendemos la propiedad privada”, continuó el funcionario respecto de lo que ocurrirá en los próximos días con los gobernadores.
