La perforación se redujo a menos de la mitad del promedio anual
Se toman como referencia los pozos antes de la crisis.
COMODORO RIVADAVIA (Por Raúl Figueroa / Especial para ADNSUR) - Según los registros actualizados por el Ministerio de Energía de la Nación, hasta el noveno mes de este año, entre enero y septiembre, se terminaron 188 pozos de explotación en la cuenca San Jorge. Ese indicador es un 32 menor que la cantidad de pozos realizada en igual período del año pasado, pero además significa un retroceso de casi un 60% frente al promedio anual de pozos perforados –para explotación- en el período que va desde los años 2009 al 2014. A nivel país, el retroceso en la cantidad de pozos frente al año pasado es más atenuado, situándose en un 13,5%, siempre atendiendo a la columna de “Pozos terminados para explotación”.
En concreto, entre enero y septiembre de este año en la cuenca se perforaron 188 pozos de explotación, contra 280 del mismo período de 2016, 461 de 2015 y 423 de iguales 9 meses del año 2014. Paralelamente, si se considera el promedio anual de perforaciones entre 2009 y 2014, surge que durante esos años el ritmo de perforación fue de 578,5 pozos por año.
De este modo, manteniéndose constante el ritmo perforador de 2017, proyectando a los 12 meses de este año, podría estimarse que el total de pozos terminados será de 250 unidades: de confirmarse esta tendencia, al finalizar el año 2017 la disminución frente al promedio anual de la primera mitad de la década anterior sería de un 59,8%.
A nivel nacional, hasta septiembre se terminaron 604 pozos de explotación comparado contra enero-septiembre del 2016, cuando se perforaron 699 pozos, la caída es del 13,5%; contra 2015, con 909 perforaciones, el retroceso es del 33,6%. Y frente a 2014 con 877,1 pozos, la caída representa un 31%.
El menor ritmo de perforación se verifica en las caídas de producción, que en la cuenca San Jorge se ubica en el 9% de retroceso, con especial énfasis en Chubut, lo que plantea interrogantes de cara a la proyección del año 2018 y el modo en que se podrían recuperar los ingresos por regalías petroleras.
Hasta ahora, la mejora en el precio internacional del crudo y la mayor cotización del dólar podrían augurar algún tipo de recupero, pero cuya magnitud está lejos de compensar las enormes pérdidas de recursos de los últimos 3 años.