La propuesta de Milei para eliminar la coparticipación: ¿Cómo afectaría a Chubut?

El primer lugar obtenido por Javier Milei en las PASO y la chance concreta de que se transforme en presidente de la Nación, si es que confirma ese resultado en las elecciones de octubre y una eventual segunda vuelta de noviembre, lleva a prestar especial atención a las propuestas rupturistas que plantea el líder libertario.

Además de distribuir el presupuesto educativo mediante ‘vouchers’ para que las familias envíen sus hijos a la escuela y eliminar el Ministerio de Educación, o eliminar el Banco Central y promover la dolarización de la economía, la plataforma de los libertarios propone “eliminar la coparticipación”, en referencia a la distribución de los impuestos que recauda el Estado nacional y luego los reparte a las provincias.

No hay mayores precisiones sobre el tema, más allá del enunciado que se hace en forma genérica, a lo largo de los 13 páginas que conforman la plataforma electoral de ‘La Libertad Avanza’, mientras que en uno de los puntos se plantea que habrá ‘financiamiento estatal a partir de un régimen de regalías y concesiones por la explotación de recursos naturales”.

De esto se deduce que las provincias deberían financiarse con los recursos propios. También podría deducirse que, a partir de esa reforma, que no sería tan sencilla de aplicar, porque requiere una reforma constitucional, las provincias se quedarían con la recaudación de impuestos nacionales en sus propios territorios. Es decir, IVA, Ganancias, etc.

Así lo dejó entrever el propio líder libertario, al asegurar que reemplazaría el régimen de coparticipación por un sistema en el que “vos gastás en función de lo que recaudás”, según expresó en la entrevista con Alejandro Fantino, publicada ayer por esta agencia.

CUÁL SERÍA EL IMPACTO EN CHUBUT

El sistema de coparticipación federal de impuestos está creado por la Constitución Nacional. Para eliminarlo, como se dijo, sería necesaria una reforma constitucional, lo que requiere una mayoría calificada. Vale insistir, entonces, en que más allá del enunciado, la medida parece hoy bastante lejana, sobre todo considerando que los resultados de la elección primaria no le garantizan, al menos por ahora, una mayoría legislativa propia.

Sin embargo, el debate puede ser útil para reformular la política de reparto, en la que Chubut tiene una larga historia de postergaciones, tratándose de una de las pocas provincias del país que aporta más recursos de los que en realidad recibe.

En el supuesto de que se eliminara el régimen actual de coparticipación, la consecuencia para esta provincia sería la pérdida inmediata de alrededor de un 40% de los recursos que recibe hoy, según precisó el asesor financiero Daniel Ehnes, ex subsecretario de Economía de Chubut.

Una rápida mirada al presupuesto provincial 2023 permite corroborar el dato. Chubut previó ingresos por 416 mil millones de pesos para este año, de los cuales en el primer semestre ya recaudó algo más de 82 mil millones, provenientes de la coparticipación federal.

Según lo que se desprende de los dichos de Milei, entonces Chubut debería suplir esa pérdida de recursos por la recaudación propia. Hay que recordar que los ingresos actuales ya prevén esos componentes, que son las regalías petroleras y los impuestos provinciales, pero ninguno de esos ítems podría crecer para reemplazar lo que deje de llegar de Nación.

UN SISTEMA DE REPARTO INEQUITATIVO

Siguiendo con los supuestos, entonces la provincia debería quedarse con los impuestos nacionales que hoy se recaudan en su territorio y se envían a Nación, que luego los distribuye entre las provincias, en un modo inequitativo.

Tal como ha señalado ADNSUR en informes anteriores, Chubut es una de las pocas provincias del país que contribuye al Producto Bruto nacional por encima de lo que luego recibe en el reparto de la torta.

Según el libro “Una vacuna contra la decadencia”, escrito y publicado el año pasado por Sergio Gordano, ministro de Economía de la provincia de Córdoba, hay ocho provincias que entregan más de lo que reciben, en el sistema de reparto actual. Además de la provincia mediterránea, entre las perjudicadas se cuentan Chubut, Neuquén, Tierra del Fuego y Santa Cruz.

De acuerdo con los datos publicados en aquel trabajo, Chubut recibió, según datos del año 2019, un 34% menos de lo que aportó al producto bruto interno nacional. Dicho de otro modo, mientras el coeficiente de coparticipación nacional que llega a las arcas chubutenses es del 1,5% (uno de los más bajos del país), su aporte al PIB ese año fue del 4,4%.

Puesto en términos prácticos, si Chubut recibiera una cuota acorde a lo que produce, entonces la proyección de ingresos para este año debería haber crecido en no menos de 50.000 millones de pesos, en materia de coparticipación federal.

Cuando Milei habla de eliminar la coparticipación pone como ejemplo los casos de provincias como Formosa, que reciben más de lo que aportan. La provincia gobernada por Gildo Isfrán desde hace casi 3 décadas recibió, según aquel análisis del ministro cordobés, un 170% más de lo que contribuyó; le siguió La Rioja, con 113%; Chaco, con el 101% y Catamarca, con el 82%.

Probablemente la solución no sea eliminar el sistema por completo, pero sí, en cambio, avanzar en el cumplimiento de lo que se dispuso en la reforma constitucional de 1994: debatir un nuevo esquema de distribución de recursos, más equitativo, acorde a la contribución de cada jurisdicción provincial.

En ese nuevo reparto, Chubut podría aspirar también a la reparación, tras la pérdida de casi un punto cedido en la década del 80 por el gobierno provincial de aquel momento. Según había estimado Daniel Ehnes, que colaboró en el proyecto de ley de reparación histórica para la provincia, por ese ítem Chubut debería aspirar a recuperar alrededor de 2.000 millones de dólares, que deberían compensarse mediante obras de infraestructura financiadas por el Estado nacional.