Torres: "Nos queremos hacer cargo del Procrear a través de Chubut Fideicomisos"
El gobernador aseguró, en su discurso de apertura de sesiones, que la provincia tiene la capacidad para hacerse cargo de esas viviendas, confirmando así el adelanto de ADNSUR.
En el marco del discurso de apertura de las sesiones en la Legislatura de Chubut, el gobernador Ignacio Torres confirmó que buscarán hacerse cargo del programa nacional Procrear para la construcción de viviendas.
“Tenemos la posibilidad de hacernos de los pasivos del Procrear a través de Chubut Fideicomisos. Tenemos la capacidad para hacernos cargo de esas viviendas”, indicó Torres, confirmando el adelanto de ADNSUR.
Y aclaró que había un principio de acuerdo con el ministro de Infraestructura anterior. “Nos queremos hacer cargo del Procrear y tenemos como hacerlo”, afirmó.
DE QUÉ SE TRATA CHUBUT FIDEICOMISOS
Con un padrón de más de 31.000 familias chubutenses inscriptas esperando una vivienda en el IPV -en algunos casos hace décadas- más un mercado inmobiliario sub ejecutado ante la falta de crédito accesible, el gobierno provincial trabaja en el diseño de una nueva herramienta a través de un fideicomiso con la participación estelar del Banco del Chubut para agilizar el acceso al financiamiento de viviendas.
ADNSUR tuvo acceso a los puntos centrales de la idea que aún está en etapa embrionaria. El objetivo es implementar una política de shock a la industria de la construcción a partir de la inyección de liquidez en un mercado que hoy está paralizado, con la obra pública nacional detenida, y ausencia de financiamiento privado para el acceso a la vivienda propia por parte de sectores de menores ingresos y sectores medios, que además deben afrontar un enorme aumento en los alquileres, donde también hay una demanda que supera a la oferta.
El desafío que se planteó la actual gestión es reactivar la entrega de créditos para la compra o construcción de viviendas, en una asociación que tendría tres patas: el gobierno provincial (con el aporte clave del Banco del Chubut), las cámaras empresarias de la construcción, y el sector de los vendedores.
La visión actual es que el Instituto de la Vivienda seguiría ocupándose de las viviendas sociales, para sectores de menores ingresos, ya que tiene personal para hacer ese tipo de relevamientos. Pero el objetivo de este nuevo mecanismo a través de un fideicomiso será ocuparse además de viviendas un poco más grandes, de 90 o 120 metros cuadrados, destinadas a familias de ingresos medios que pueden afrontar una cuota más alta, pero que hoy están expulsadas del sistema de créditos bancarios.
QUIÉNES ACCEDERÍAN
Según este proyecto embrionario, con estos cambios se apuntaría a un enorme sector intermedio que hoy estaría afuera del mercado inmobiliario, porque no califica para viviendas sociales, pero tampoco para los altos requisitos bancarios. Una enorme masa de familias asalariadas que debe pagar altos alquileres y ve como pasan los años sin poder acceder a su propia casa.
Y la otra consecuencia obvia sería reactivar el trabajo en el sector de la construcción, inyectando un flujo de divisas que generaría miles de puestos al sector de la UOCRA, que hoy ve con peligro los anuncios nacionales de paralización de la obra pública.
Ahora resta trabajar en la letra fina, para la que aún faltan algunos datos de relevamiento del mercado para un panorama más concreto de cuánto dinero se va a aportar en una primera etapa. Luego se piensa convocar a las empresas constructoras y a los agentes inmobiliarios, para explicar los ejes del nuevo sistema y buscar que se trate de un negocio rentable para todas las partes.
El anuncio formal lo hará el gobernador Ignacio Torres en las próximas semanas, pero se sabe que hay mucha ansiedad por conocer los avances y que el pedido es que esté listo cuanto antes. El diagnóstico es clarísimo: hay demanda de viviendas pero falta financiamiento, y hay que impedir la pérdida de puestos de trabajo en la construcción. Uno de los tantos temas urgentes que tiene resolver Chubut.