"Se me soltó la cadena": habló la madre que golpeó a un compañero de su hijo porque le hacía bullying
“Reclamé 10.000 millones de veces que el bullying contra mi hijo se frenara. Eso viene de hace muchos meses”, declaró la mujer.
La mujer que entró en una escuela de Río Negro y agredió a un estudiante al que acusó de hacerle bullying a su hijo, reconoció que no tuvo “la reacción adecuada” y sostuvo que “se le saltó la cadena”.
La violenta escena ocurrió en un aula de la escuela CEM 1 de General Roca y Narváez asegura que se llegó a esta situación por el fracaso de la escuela en poner fin al acoso que sufría su hijo. “Reclamé 10.000 millones de veces que el bullying contra mi hijo se frenara. Eso viene de hace muchos meses”, sostuvo.
“Muchas veces me presenté en la escuela a pedir que solucionaran la situación, a pedir reuniones con los padres de estos chicos”, dijo la mujer.
Según Narváez, ese día se presentó en la escuela y pidió hablar con el director, pero éste no la recibió. También dijo que en otra oportunidad sufrió maltrato por parte de la dirección de la escuela y que el director hasta “le echó la culpa a su hijo” del acoso que sufría. “La escuela no pudo controlar la situación, me sobrepasó y terminé increpando (al alumno) en el curso, haciendo justicia por mano propia, defendiendo a mi hijo”, continuó.
En este sentido, Narváez dijo que su hijo sufrió “situaciones de acoso en el baño, escupitajos”, que le rompieron la ropa, lo insultaron y hasta lo amenazaron con “darle una golpiza a la salida” del colegio. Narváez dijo que “salió a pedir perdón de corazón” tanto al chico que agredió como a su familia, aunque recalcó que a su hijo “nunca le pidieron disculpas”. A su vez, negó versiones de que su hijo también sea un acosador. “Quieren ensuciar a mi hijo y hacerlo pasar por violento. Los pibes siguen yendo a la escuela y mi hijo no”, se lamentó.
Por su parte Roxana, la madre del adolescente agredido, dijo que denunció penalmente a Narvaéz y dio una versión diferente de los hechos: “Este chico ingresó a mitad de año, ya lo habían echado de otros dos colegios. Ni siquiera es compañero de mi hijo, es dos años más chico. Vive peleando. Con mi hijo se peleó hace dos semanas en la calle, y después lo amenazó llevando cuchillos al recreo”.