"Son una raza nacida para sufrir": Advierten sobre problemas de salud en perros con narices chatas
En varios países han comenzado a desalentar la reproducción y venta de perro de este tipo de razas, por los problemas que acarrean debido a su modificación genética, como problemas respiratorios y vómitos crónicos , entre otras secuelas.
La moda de los perros de “narices” chatas se vive en todo el mundo. Un cachorro puede llegar a costar desde 200 mil pesos. En Argentina, los bulldogs franceses son los perros más comprados. Sin embargo, detrás del comercio de estas razas modificadas genéticamente, se vive una situación desconocida para muchos sobre los diversos problemas de salud que traen este tipo de razas.
Quienes tienen perros de nariz chata se entienden sin hablar. Hay un meme muy popular en TikTok que se agrega como audio a los videos de bulldogs ingleses, bulldogs franceses o pugs. "I want problems always". Quiero problemas siempre.
Pero lejos del humor en redes sociales o de la literalidad de haberse comprado un problema, el debate ya es mundial sobre si es ético reproducirlos frente a las complicaciones de salud de estas razas.
Hace un año Noruega prohibió la reproducción de dos razas puntuales, bulldog inglés y cavalier king charles spaniel, "porque (por sus hocicos tan planos) experimentan sufrimientos incompatibles con la ley de protección de los animales".
Pero ahora Países Bajos lo extendería para todos con la misma condición y, si se aprueba, ni siquiera se podrá hacer publicidad ni publicar imágenes de estos perros en las redes. El efecto contagio podría expandirse al resto de Europa.
El Colegio Real de Veterinarios de Reino Unido advirtió en agosto del año pasado que “son una raza nacida para sufrir” y por eso, habían solicitado desalentar su reproducción y venta.
La Asociación Mundial de Veterinarios de Pequeños Animales (WSAVA, por sus siglas en inglés) emitió un comunicado alarmante. Marcan la popularidad de estas razas como "dramáticamente alta" y hablan puntualmente de la braquicefalia --el nombre técnico que describe los hocicos cortos y la forma del cráneo-- como una "crisis de bienestar canino emergente causada por el número cada vez mayor de perros de nariz chata".
Las cruzas genéticas en pos de una estética “simpática” tienen "características anatómicas exageradas" que pueden afectarlos seriamente, advierten veterinarios.
Lo peor es el Síndrome Obstructivo Respiratorio Braquicefálico (SORB), que incluye trastornos digestivos que los convierte en vomitadores crónicos.
“Con los bulldogs franceses ahora como la raza más popular en muchos países y también los bulldogs y pugs ingleses muy populares, la cría selectiva de una nariz demasiado corta creó perros cuya salud, en muchos casos, se ve comprometida por el bien de la ternura percibida. Simplemente, no es ético criar perros que luchan por respirar”, dijo en ese texto Peter Sande, director del Centro para el Bienestar de los Animales de Compañía de la Universidad de Copenhague.
Frente al resto de las razas, los de nariz chata tienen 30 veces más posibilidades de padecer enfermedades respiratorias graves. Viven apenas entre 8 y 10 años y muchos necesitarán alguna operación para mejorar su calidad de vida.