"Un 60% de la población" no accede a medicamentos, educación o infraestructura

COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR/Escuchá el audio) – Previo a que se den a conocer los nuevos índices de pobreza del INDEC, el investigador del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA, Eduardo Donza remarcó en Actualidad 2.0 que “un 60% de la población tiene una de las falencias” para el acceso a medicamentos, educación, infraestructura, etc, mientras que “el 25% tiene más de uno de estos derechos vulnerados”. Destacó la necesidad de trabajar en la pobreza estructural debido a que “es casi independiente de los gobiernos porque no hubo grandes variaciones. Puede haber variaciones de 1 o 2 por ciento en el índice de pobreza pero seguimos sin resolver los problemas estructurales”.

Donza planteó que “la tendencia es la misma en indicadores nuestros como el del Indec. El índice 2018 no lo tenemos todavía, pero en 2017 había bajado el indicador de pobreza en comparación con 2016 y 2015. Lo que esperamos es que esa tendencia cambie y lo que venía de un descenso sistemático, por diversas razones, una desaceleración del aumento de precios”.

“En 2018 la devaluación de los primeros meses que aceleró la inflación y el aumento del precio de alimentos que empeora la situación, la obra pública que tiene una perspectiva de recorte y los sectores medios que restringen los gastos, todo eso nos da un escenario más adverso”, sostuvo.

Planteó que “lo esperado es que aumente la pobreza que se va a presentar mañana y también nuestros indicadores que aparecerán a fin de año”.

En 2017 la pobreza había bajado 4 puntos con 25% en comparación con 2016, pero para el presente año, “es posible que el dato que aparezca mañana del INDEC es del primer semestre y será como un escalón intermedio. El golpe grande se verá cuando uno analice el segundo semestre de 2018. Lo que hay que tener en cuenta es que en Argentina tenemos un problema estructural. Esta forma de análisis es muy elástica con respecto a las crisis o bonanzas”.

“Lo más serio en Argentina, es que tenemos una situación estructural no sólo medida por ingresos sino por la calidad de viviendas y servicios. Sobre todo la conexión cloacal, el sistema de salud y seguridad social”, detalló.

Donza remarcó que “un 60% de hogares tiene algún tipo de falencia y un 25% de las familias tienen 3 o más de estos derechos vulnerados. Es decir que por más que venga un auge, nos va a llevar tiempo salir de esta situación”.

“Si estamos hablando de que va a mejorar el indicador de pobreza, yo también diría que baja un punto o dos, pero hay una cuestión estructural. Hay un sector informal que lo tenemos muy desarrollado; nunca pudimos hacer una mejora en las estructuras regionales, ni mejorar las ventajas competitivas”, resumió.

Respecto a la asistencia que se brinda con la asignación universal por hijo, Donza consideró que “las coberturas sociales son un paliativo, una contestación a una situación de emergencia para cubrir gastos de alimentación. Es un paliativo necesario que tiene que continuar y que por suerte no se cortaron”.

“No solamente se necesitan ingresos elevados, sino también la situación de las viviendas. Hay jóvenes por fuera del sistema educativo, y enfermedades propias de la pobreza como la tuberculosis o mal de chagas”, ejemplificó.

"Es casi independiente de los gobiernos porque no hubo grandes variaciones. Puede haber variaciones de 1 o 2 por ciento pero seguimos sin resolver los problemas estructurales”, agregó y remarcó que “el dato que va a aparecer mañana en el INDEC va a ser un escalón intermedio; el más grande se va a ver en 2019”.