A los 13 años se quedó muda, vomitó una moneda a los 25 y recuperó el habla
La mujer hoy tiene 48 años y cuenta su trágica historia en un libro autobiográfico.
AUSTRALIA - La protagonista de esta historia hoy tiene 48 años, pero en su infancia sufrió un insólito episodio que cambió su vida para siempre. Se trata de Marie McCreadie, oriunda de Australia. A sus 13 años y de un día para el otro, la mujer perdió el habla. De inmediato, sus padres la llevaron a diferentes consultas médicas. Todos creían que se trataba de un bronquitis o laringitis, sin embargo, con el tiempo esas posibilidades desaparecieron. Los meses pasaron y la joven seguía sin voz.
Marie tuvo que empezar a hablar con señas y así su vida cambió para siempre, hasta que cumplió 25 años. En un hecho inédito, la mujer recuperó la voz, también de un día para el otro. No obstante, el episodio que vivió fue verdaderamente trágico.
“Un día, 12 años después de quedarme sin voz, estaba en el trabajo cuando comencé a toser y sangrar por la boca. Mi compañero de trabajo llamó a una ambulancia”, explicó la mujer en un libro que escribió sobre su vida.
La mujer fue llevada a la clínica más cercana y allí se llevó una gran sorpresa: “Había empezado a hacer pequeños ruidos, gimiendo, llorando y fue entonces que los doctores encontraron una moneda de tres peniques. No tardé mucho en volver a hablar, ya que había estado imitando palabras toda mi vida. En efecto, había estado hablando sin que saliera ningún sonido.”
En su libro, Maria McCreadie cuenta todos los obstáculos que debió enfrentar a lo largo de su vida, tras haberse quedado sin voz. De hecho, durante su adolescencia, la mujer sufrió varios intentos de suicidio, a raíz de las burlas de sus compañeros de colegio.
“Mi viaje ha sido largo y lleno de acontecimientos, desde la depresión extrema en los primeros días hasta el levantamiento y la valentía para encontrar mi lugar en el mundo”, dijo. Y agregó: Aunque ha habido malos momentos en los que me he sentido completamente sola y sin amor. También he tenido buenos momentos, conociendo a las personas adecuadas y aprendiendo a manejar mis sentimientos y emociones”
Ahora, la mujer se dedica a la escritura, es madre de dos niñas y tiene tres nietos.