Alerta mundial: activan un protocolo de seguridad por un asteroide que podría impactar en la Tierra
Se trata del objeto conocido como 2024 YR4, que tiene un tamaño de 90 metros de diámetro
Por primera vez en su historia, la Organización de las Naciones Unidas (onu) activó un Protocolo de Seguridad Planetaria por un asteroide que podría impactar en la Tierra. Se trata del objeto conocido como 2024 YR4, que tiene un tamaño de 90 metros de diámetro y se calcula que podría caer el 22 de diciembre de 2032.
Si bien recordaron que la probabilidad de colisión es baja, con un 1,5%, el descubrimiento del asteroide en diciembre de 2024 puso en alerta a la NASA y a la Agencia Espacial Europea (ESA), que ya están trabajando en la evaluación de estrategias para evitar un posible impacto.
El asteroide ha sido clasificado con un nivel 3 en la Escala de Riesgo de Impacto de Turín, lo que indica que, aunque no se considera una amenaza inminente, requiere un monitoreo constante. Para esto, la ONU activó la Red Internacional de Alerta de Asteroides (IAWN) y el Grupo Asesor de Planificación de Misiones Espaciales (SMPAG), bajo la coordinación de la NASA y la ESA. Estas organizaciones trabajan para evaluar y proponer posibles soluciones, como la desviación de la trayectoria del asteroide, una técnica que ya se ha probado con éxito en misiones previas, como la de la nave DART en 2022.
A pesar de que la situación está siendo tomada con seriedad, las proyecciones iniciales indican que Europa no se encuentra entre las áreas de mayor riesgo. En cambio, cinco regiones del planeta podrían verse afectadas: el este del océano Pacífico, el norte de Sudamérica, el océano Atlántico, África y el sur de Asia.
Se espera que para 2028, cuando el asteroide pase a unos 8.000.000 de kilómetros de la Tierra, los cálculos sean más precisos, lo que permitirá evaluar con mayor certeza la situación. En el caso de que se produzca un impacto, la energía liberada sería comparable a la de una explosión nuclear, con efectos similares a los que se vivieron en Tunguska en 1908. Sin embargo, los expertos señalan que, en un escenario hipotético de colisión, es probable que el asteroide caiga en una zona deshabitada o en el océano, lo que minimizaría los daños.
Con información de Noticias Argentinas, intervenida por IA, bajo supervisión y edición de ADNSUR
