Arranca octubre con alquileres actualizados al 67,5%: en Comodoro se mantiene la escasa oferta de viviendas familiares

Mientras en Buenos Aires se registra un incremento en la tendencia de establecer precios de alquileres en dólares, desde Comodoro Rivadavia se aseguró que esa modalidad no forma parte del mercado local, salvo algún caso excepcional. Mientras tanto, la actualización de este mes alcanzó el 67,5% anual, según el índice que publica el Banco Central para actualizar los valores que, de acuerdo con la nueva ley que rige en el sector, sólo puede hacerse cada 12 meses.

Una información publicada este lunes por Ambito dio cuenta de que, según datos de Zonaprop, el 39% de los valores de los alquileres en la Ciudad de Buenos Aires se están publicando en dólares, lo que significa una tendencia en aumento: en 2021, esa modalidad alcanzaba al 33% de la oferta y en 2020, al 31%. Se trataría, según el informe, de una forma de “cubrirse frente a la ley de alquileres”, por parte de los propietarios.

Por otra parte, uno de los actores del mercado inmobiliario local negó que esa misma tendencia se esté dando en Comodoro Rivadavia. “Para nada –comentó Fabián Almonacid, desde Estudio Flamig-. Absolutamente nada de eso. Nosotros tenemos muchos alquileres y en ningún momento fijamos valores en dólares; a lo sumo puede haber algo así en bases petroleras, que son contratos de 2 ó 3 millones de pesos, que se pueden hacer a valor de dólar oficial, pero todavía no hemos cerrado ningún contrato de ese tipo”.

Almonacid explicó además que incluso en locales comerciales grandes, con recientes contratos que realizó su estudio, “se alquilaron en pesos con ajuste semestral, algo que es posible para el sector comercial, con ajustes cada 6 meses del 30 o 35%”.

En igual sentido, el empresario detalló que la actualización de valores de alquiler para viviendas familiares alcanzaron en octubre una actualización del 67,5%.

En relación a los alquileres en dólares, insistió en que “puede haber algo de forma excepcional, pero no va a ser la regla. Puede ser que en el sector de turismo, ahora que viene un fin de semana largo y con la llegada del TC, seguro no va a haber plazas disponibles. Pero pasan esos días y después se normaliza”.

Los alquileres llegarían al 100% a mitad del año próximo

Al trazar una proyección del ritmo de actualización, el empresario inmobiliario estimó que al ritmo actual, el valor de alquileres podría duplicarse a partir de junio de 2023, en base al coeficiente que se aplica siguiendo los índices de inflación.

“No sé si en pocos meses, pero creo que hacia la mitad del año próximo vamos a estar en el 100% -estimó-. Una persona que ahora en octubre recibe un valor nuevo del 67%, todavía no llega a compensar la inflación del último año, que ha estado por arriba de ese valor. Un departamento de 1 dormitorio, que estaba en 40.000 pesos, se va a 67.000 pesos, para algo relativamente nuevo y bien ubicado, con cochera. O una casa, de mediana calidad, que el año pasado se alquiló en 40.000 pesos, hoy en 65 ó 67.000 te lo sacan de las manos: no se queda fuera del mercado con esta actualización, porque la demanda es constante, ante la baja cantidad de unidades. Y mientras tanto, el propietario lo que hace es recuperar una parte, porque en los últimos 4 meses ya sabía que su propiedad vale más y él seguía cobrando lo mismo que el año pasado”.  

Baja rentabilidad

Almonacid indicó además que la rentabilidad para los propietarios sigue bajando, ya que hoy está en un 0,25% semestral, cuando en otros países latinoamericanos se  ubica muy por encima de esa referencia.

“La rentabilidad histórica anual en Argentina era de un 1% mensual, pero hoy no llega al 3% anual. Uruguay, Chile o Paraguay  están entre 8 y 9%, de lo que nosotros quedamos muy lejos. Por supuesto, en otras ciudades como Miami, están entre el 10,5 y el 11% de rentabilidad anual”.

Esa circunstancia, detalló, restringe aún más la oferta de viviendas en alquiler, si bien quienes tienen capacidad de ahorro tratan de canalizar el mismo a través de una propiedad, en lugar de quedarse con los dólares o pesos “guardados”.