Clausuraron comercios y decomisaron una tonelada de pollo en mal estado
El municipio intensifica controles en barrios periféricos, donde clausuró tres locales por falta de habilitación y decomisó alimentos en mal estado. El operativo busca reforzar la seguridad alimentaria y garantizar el cumplimiento de las normativas comerciales.
El Municipio de Cipolletti anunció el refuerzo de los controles en comercios de barrios periféricos como Distrito Vecinal Noreste, Ferri y Anai Mapu. Estos operativos, realizados por la Dirección de Comercio, tienen como objetivo asegurar el cumplimiento de las normativas de habilitación y resguardar la salud alimentaria de los vecinos. Durante el último relevamiento, fueron clausurados tres locales sin habilitación y se decomisó una tonelada de pollo en mal estado.
Diego Zúñiga, director de Comercio, detalló que “hasta el momento hemos inspeccionado más de 100 comercios en la periferia”. En su mayoría, los locales cumplen con las normativas, aunque aún existen puntos críticos en los que se realizan intervenciones específicas. Según Zúñiga, los controles han incrementado el interés en la regularización comercial, con 750 expedientes actualmente en trámite para obtener habilitaciones. Estas inspecciones se realizan en conjunto con Bromatología y Abasto, organismos que verifican las condiciones de seguridad e higiene de cada establecimiento.
El pasado 30 de octubre, tres locales ubicados en la zona de calle Arturo Illia y Ruta 151 fueron clausurados preventivamente. Los comercios, pertenecientes a los rubros de corralón, vivero y taller mecánico, operaban sin la habilitación correspondiente y ya habían sido notificados con anterioridad. Ante la falta de cumplimiento, se procedió a la clausura y se dio intervención al Juzgado de Faltas para seguir el trámite correspondiente.
En una inspección de rutina realizada el 1 de noviembre, el Departamento de Calidad Alimentaria detectó una tonelada de pollo en mal estado en un establecimiento sobre calle Las Heras. Debido a las condiciones de los productos, no aptos para el consumo, se procedió a decomisar la mercancía y a clausurar el local de manera preventiva. “Estas acciones son necesarias para prevenir enfermedades transmitidas por alimentos y asegurar que los productos comercializados cumplan con los estándares de calidad y seguridad”, explicaron desde la Dirección de Comercio.
Desde el Municipio recalcan la importancia de acompañar a los comerciantes que buscan invertir y generar empleo en la ciudad, sin descuidar la seguridad de los consumidores. Los operativos de inspección y fiscalización no solo buscan verificar la regularidad de los comercios sino también garantizar que las condiciones edilicias y sanitarias de los locales cumplan con las exigencias. “Es fundamental que todos los productos alimentarios cumplan con las regulaciones para asegurar la salud de nuestra comunidad”, afirmó Zúñiga.
Con información de Cipo360, bajo supervisión y edición de un periodista de ADNSUR.