COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - El secretario de Servicios a la Comunidad, Rubén Palomeque remarcó que "con todo lo que ha llovido, los problemas fueron menores a los previstos y se lograron mantener los accesos a los barrios, lo que era nuestra mayor preocupación”. Por tal motivo, aseguró que "se actuó rápidamente para minimizar las consecuencias de las precipitaciones”.

Foto: Prensa MCR

Palomeque afirmó que “se llevaron adelante tareas preventivas durante los últimos días, teniendo en cuenta el pronóstico de precipitaciones que finalmente se concretó. Desde que comenzó la lluvia, sumado a la marejada y al viento del este, estuvimos alerta y preparados para actuar rápidamente y minimizar sus consecuencias, con maquinaria ubicada en sectores que podían sufrir complicaciones”.

En esa línea, indicó que “con la gran cantidad de agua caída, se fueron cargando los cañadones y la misma en principio escurrió por los lugares naturales, hasta que, durante la mañana, en algunos sectores empezó a salir de los cauces normales, ocasionando inconvenientes”.

El funcionario señaló que “en barrio Astra se estuvo trabajando preventivamente hasta el sábado a la tarde, en el zanjón que siempre provocó problemas, aunque se trata de una tarea que llevará tiempo. Allí, el agua supero la capacidad del canal y desbordó hasta inundar varias calles del barrio, ya que los canales internos del barrio no soportan ese caudal. Inmediatamente, acudimos en horas de la mañana para atacar la situación y, viendo cómo trabaja el agua en ese canal, encontramos una posible solución a futuro tras esta tormenta. Se continúa trabajando en el lugar y manteniendo contacto permanente con la Vecinal”.

Asimismo, expuso que “la nueva urbanización que lleva adelante el IPV detrás del barrio Gesta de Malvinas trae un escurrimiento de agua que afecta al sector, ya que aún está en obra. En la zona industrial de Km. 8, se está trabajando con retroexcavadoras y camiones chupa para desagotar el nivel de agua y que no se afecten los patios de las casas en el sector aledaño”.

Respecto a la zona sur, explicó que “en Avenida Chile, un escurrimiento de agua que viene de Fracción XIV y XV superó la capacidad del caño que atraviesa esta arteria, por lo que se desborda. Se trabajó fuertemente y se generó un badén, porque el caño se tapa rápidamente debido a la cantidad de barro que baja y no cumple su función, desbordando por arriba”.

Los barrios Pueyrredón y Juan XXIII no sufrieron mayores inconvenientes. La Avenida 10 de Noviembre se impactó pero se solucionó de forma rápida, lo mismo que el barrio Malvinas Argentinas, donde se formó una laguna en su ingreso por la calle Silvina Ocampo que causaba problemas, pero cerca del mediodía, trabajando con máquinas, se pudo lograr el escurrimiento y bajar el nivel de agua”, sostuvo.

En cuanto al canal de Avenida Roca, el secretario manifestó que “se observó un comportamiento extraño, con algunos tramos con alto nivel de agua y en otros bajo, pero se está controlando permanentemente el funcionamiento del mismo”.

Hemos tenido algunos inconvenientes en barrio Moure, donde se trabajó con maquinarias hasta el sábado a la tarde, profundizando las piletas de decantación y ampliando el canal, que de todas maneras desbordó. Debemos tener en cuenta que la urbanización en este sector se encuentra dentro de lo que es una pileta de decantación natural”.

Por último, Palomeque afirmó que “con todo lo que ha llovido, los problemas fueron menores a los previstos. No se observó ninguna situación que impida el acceso a los barrios a un vehículo de emergencia, lo que era nuestra mayor preocupación, pero continuaremos con este protocolo, con las máquinas ubicadas estratégicamente y la logística garantizada, hasta que cese el alerta”.

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