Cuál es el instrumento financiero de fácil acceso para ayudar a que tus pesos tarden más en “evaporarse”
Los rendimientos oscilan hoy entre el 50 y 55% anual, es decir por debajo de un plazo fijo tradicional, pero con la ventaja de la disponibilidad inmediata. Se pueden depositar por pocos días y los especialistas destacan los altos estándares de seguridad. No hay límites mínimos en cuanto al monto a depositar.
Mientras la inflación sigue su ritmo habitual y todos nos acostumbramos a la inercia de que cada día la plata alcance para comprar menos bienes o servicios, vale detenerse a pensar cuánto se pierde día a día al tener unos pesos “en el bolsillo”, o en la billetera de cuero. O en una billetera virtual.
Un ejemplo sencillo: los 10.000 pesos que te sobraron del fin de semana pasado valen, al ritmo actual, unos 9.800 una semana después. Y si los dejaste ‘quietos’ todo el mes, si la inflación de agosto volviera a confirmarse en torno al 7%, similar a julio, entonces esos 10 billetes de mil equivaldrían hoy a 9.300 pesos, al cabo de sólo 30 días.
Es decir, el poder de compra se redujo sin gastar nada, por el mero transcurso de unos días y la inflación que ya se da por sentado que seguirá a este ritmo acelerado, por lo menos, hasta fin de año.
En ese contexto, se siguen popularizando las opciones para generar algún tipo de interés con la plata que probablemente no vas a usar mañana ni pasado, pero que tampoco la querés dejar en un plazo fijo por el temor a necesitarla antes de que se cumplan los inamovibles 30 días para el retiro (ó 60, ó 90, si esa fue la opción elegida).
Por eso volvemos hoy sobre una opción ya presentada en esta sección, como es la denominada “caución bursátil”, un instrumento financiero que puede ser útil para preservar, al menos en parte, el poder adquisitivo de esos pesos que inevitablemente se seguirán deteriorando, pero con la posibilidad de retirarlos en cuanto sea necesario.
Un ejemplo muy común para pensar este tipo de situaciones es la plata que se está ahorrando para cumplir una determinada obligación: el pago de impuestos, o de una factura de servicios, por un trabajo que se está realizando en casa, una reparación de un vehículo, etc.
Tengo los 35.000 pesos que debo pagar por ese trabajo, que se va a completar dentro de 15 días. ¿Qué hago para evitar la pérdida de valor, mientras reúno algunos pesos más para completar lo que me falta para pagar? Ahí es donde aparece la alternativa de la caución bursátil.
Cuál es la ventaja de la caución, pese al menor interés frente a un plazo fijo
Como ya explicamos en otra edición de esta sección, a partir del diálogo con especialistas en el tema, la caución es muy parecida a la colocación de un plazo fijo, pero con la ventaja de que el dinero se puede colocar por una escasa cantidad de tiempo, con la opción del retiro inmediato en cualquier momento. Y sí, no dejás de perder contra la inflación. Pero el concepto aquí es perder un poco menos.
Vale repasar una definición básica de este instrumento. Según explican desde la consultora Cohen Aliados Financieros, “la caución bursátil es una inversión similar al Plazo Fijo: se trata de un préstamo de corto plazo (de 1 a 120 días hábiles), con la diferencia de que el ‘tomador’ de dicho dinero no es un banco, sino otro inversor, quien deja títulos en garantía para respaldar la operación. Al igual que en un plazo fijo, quien presta el dinero (colocador de la caución) recibe una rentabilidad en concepto de interés (el cual es calculado como TNA -tasa nominal anual-). Este préstamo puede ser realizado tanto en pesos como en dólares”.
Con un interés que puede rondar entre el 3,5 y 4,5% mensual, lo que significa algo menor a un plazo fijo tradicional, que hoy ofrece una tasa del 5,8% (aunque algunos bancos ofrecen algunas décimas menos), quienes optan por este instrumento priorizan la posibilidad del retiro inmediato.
Como dijimos en otros informes, en el sistema el colocador deposita su dinero y éste es tomado por otro agente, mientras que el broker oficia como intermediario, para lo cual obtiene una comisión. “Ah, ¿pero entonces tengo que ir a la Bolsa de Nueva York, o la de Buenos Aires, para tratar de guardar 15.000 mangos?”, podría pensar alguien a quien le resulte extraño este instrumento. La respuesta es no, pero hay que llegar hasta el siguiente apartado.
Otra ventaja, antes de llegar al instructivo de cómo hacer una caución, es la seguridad que ofrece este instrumento. En el informe elaborado por Cohen, se pondera que además de los títulos que el tomador de la caución deja en garantía como respaldo de la operatoria, “la caución bursátil está garantizada también por el Mercado de Valores, lo que lo convierte en un instrumento ideal para el conservador: jamás tuvo un incumplimiento en sus más de 20 años de historia”.
Cómo hacer una caución a través de brokers o billeteras virtuales
Una de las formas para realizar la caución es a través de brokers, es decir compañías de agentes de bolsas a las que hoy se puede acceder a través de sitios webs o sus aplicaciones móviles, como los casos de Balanz, Banza o Invertironline.
Si querés conocer una guía de cómo hacer una caución a través de uno de estos sitios especializados, te dejo aquí un enlace al canal del youtuber Ariel, creador de ‘Corazón financiero’, que resulta muy didáctico y útil para quienes quieran explorar este tipo de instrumentos. Lo explica paso a paso y es muy sencillo de seguir.
Según el especialista, con una tasa actual del 55%, un monto de 100.000 pesos rendiría 150 pesos en un solo día de depósito, por lo que la proyección se puede hacer sobre la cantidad de días en que se deje inmovilizado el dinero.
También hay otras alternativas para esta modalidad a través de las billeteras virtuales. Un reciente informe de Clarín enumeró las opciones con las distintas aplicaciones para quienes manejan estos instrumentos, de los que vale repasar algunos aspectos.
Estas aplicaciones ofrecen hoy la operatoria de la caución para quienes tienen saldo en su cuenta y deciden inmovilizarlo por algunos días. En los casos presentados, las tasas ofrecidas se ubican en el 50%, es decir 5 puntos por debajo de la alternativa presentada por los brokers, pero igualmente vale tenerlas en cuenta para quienes ya se habituaron al uso de las billeteras virtuales y puede resultarle más cómoda esta modalidad.
Desde la última semana de agosto, la fintech Naranja X elevó la tasa de remuneración a sus usuarios, ya que desde meses atrás estaba en un 40%, para situarse ahora al 50%.
“Una cuenta remunerada ofrece rendimientos por el dinero que se encuentra depositado, es decir, que la plata que está en la cuenta Naranja X crece diariamente, sin costos ni riesgos”, detallaron desde esa empresa en el informe referido.
Sin que el usuario deba realizar ninguna tramitación adicional (salvo elegir la opción correspondiente en su aplicación), los intereses se acreditan en la cuenta cada medianoche. Éstos se calculan cada vez aplicándole al saldo disponible la tasa del 50% anual, que equivale a una ganancia efectiva cercana al 4,1% mensual.
En esa aplicación, si el usuario deposita 10.000 pesos en su cuenta, en un día le reportará 13,88 pesos; en una semana, 104 pesos; en 15 días, 208 pesos; y en 30 días, 416 pesos. Para un monto de 50.000 pesos, esos valores crecerían desde 520 pesos por semana, hasta los 2.080 pesos si permanecen todo el mes.
Otra aplicación conocida, como ‘Ulalá’, también propone una modalidad con rendimiento similar, en el orden del 50%, aunque en este caso no se trata de una remuneración de la cuenta sino de una inversión en una especie de Fondo Común, que no tiene rendimiento garantizado pero que resulta igualmente previsible, por tratarse de una opción de bajo riesgo.
Una modalidad similar presenta la aplicación de Mercado Pago, una de las más populares, en la que también se puede invertir el dinero de la cuenta en un Fondo Común de Inversión, eligiendo la opción correspondiente, pero en este caso el rendimiento ofrecido hoy baja hasta un 43% anual.
Hasta aquí, un nuevo acercamiento al mundo financiero y a algunas herramientas que conviene tener en cuenta para seguir peleando, en condiciones bastante desiguales, contra la inflación. Como ya es habitual en este espacio, no se trata de recomendaciones ni de resultados comprobados, sino de acercar elementos para el análisis y la comparación a la hora de pensar cómo hacer para que los pesos se “estiren” un poco más, antes de que la inflación termine por evaporarlos.