Cuando "no todas las luces son barcos": relatos y testimonios de personas involucradas en avistajes de ovnis en Comodoro
No todas las luces son barcos, estrellas o basura espacial, dicen quienes dan testimonio de haber experimentado sucesos extraordinarios en el cielo y están convencidos de que existe vida extraterrestre. Para los ufólogos y estudiosos del fenómeno, el Golfo San Jorge sería, por sus características geográficas, uno de los lugares donde habría una base submarina extraterrestre.
De hecho, el 5 de agosto de 1968 una escuadrilla de ovnis fue vista saliendo del mar en Rada Tilly y volando en forma de V corta para luego sumergirse en otro lugar del Golfo. Como este hay cientos de testimonios que incluyen a Comodoro, Caleta Olivia, campamentos petroleros, Puerto Madryn, Rawson y varias ciudades de la Patagonia. En #Expedientes Comodoro, el relato de quienes dicen haber sido testigos de fenómenos extraños en el cielo. ¿Ver para creer o creer para ver?
La Patagonia en general y especialmente la zona del Golfo San Jorge, por sus características geográficas, podría ser una base submarina extraterrestre. La frase, dicha así, paraliza o por lo menos genera suspicacias.
A lo largo de la historia, cientos de relatos fueron publicados dando testimonio de ello, pero nunca confirmado por la ciencia. “La gente de Comodoro tendría que animarse más, ir a la playa más seguido, mirar hacia el mar a la noche y se va a encontrar con cosas inesperadas que no podría creer”, dice Silvia Pérez Simondini, estudiosa del fenómeno y propietaria del único museo OVNI que hay en Argentina y está emplazado en la ciudad de Victoria, Entre Ríos. Silvia dedicó su vida al estudio de este fenómeno luego de haber vivido en la ciudad de Caleta Olivia, Santa Cruz, una experiencia que le cambió la vida.
Un diario del 16 de septiembre de 1973 publicó que las “máquinas entran por la Patagonia para evitar las peligrosas radiaciones emitidas por el cinturón Van Allen que en esa zona pierde poder. El dato, difundido por la Sociedad Investigadora de Fenómenos Insólitos, indicó que el mar fue el lugar elegido para que no fueran descubiertos y que las bases están camufladas bajo el lecho marino. El fundamento sería que hasta 1954 ningún avistamiento había sido reportado en la Patagonia, pero fue en octubre de ese año que “un gran tubo fluorescente fue visto por los pobladores de Trelew. A nuestro juicio –continua la publicación – la misión de esa nave madre era elegir el lugar apropiado para la edificación de una base” que se sumaría al Triangulo de las Bermudas y el Golfo de Persia.
Un observatorio OVNI en nuestra ciudad
Pero el mar no sería el único lugar donde se manifiestan. Los ufólogos de Comodoro indican que son una presencia constante entre nosotros y que solo debemos “abrir nuestra mente” para que se nos manifiesten. Mario Triviño es Maestro Mayor de Obra y un ferviente estudioso del fenómeno en nuestra ciudad.
“Una de las hipótesis que hay es la de los viajeros del tiempo, podrían venir del futuro o de nuestro remoto pasado. Yo creo que ellos vienen a tratar de modificar nuestra mente, hacerse ver desde lejos pero no mantener un contacto estrecho hasta que llegue un momento “X” en que el ser humano tenga la mente preparada para aceptar la vida extraterrestre. Yo no trato de convencer a nadie. Yo tuve varias experiencias de avisajes”, dice.
El aeropuerto local podría ser otro de los lugares estratégicos para que se manifiesten, estima. “Creo que controlan pero no intervienen, quizás ellos están ahí para ver cuantos aviones salen, entran o la gente que entra o sale”. No es casual que en un predio cercano al aeropuerto internacional, en la zona norte de la ciudad se emplace un observatorio OVNI. Allí lejos de las luces del casco céntrico y los ruidos de la ciudad, dicen que casi con frecuencia pueden verse.
“En una noche llegamos a ver 18, dice con seguridad Mario Triviño. Consultado sobre la posibilidad de que hayan sido satélites o estrellas, explica que “un satélite se mueve alrededor de la tierra en una órbita, pero cuando vos ves una luz que viene en una trayectoria recta y hace un giro abrupto en noventa grados y sigue su camino o para en seco y vuelve para atrás o hace movimientos raros te das cuenta que no es un satélite entonces eso a mí me certifico que lo que estábamos viendo no era algo hecho por el ser humano. Hay un montón de leyes de física como la inercia que no se cumplirían acá”.
La mirada de la astronomía
El gusto por observar espectáculos en el cielo es compartido por ufólogos y aficionados a la astronomía. Cada uno en su campo y con una explicación distinta conviven en perfecta armonía.
Marco Espinosa es Ingeniero Electrónico y aficionado a la Astronomía. “En nuestro campo observamos fenómenos que son fijos, como una foto de una nebulosa y también otros fenómenos que son variables por ejemplo, un eclipse. Con esas salidas que uno hace comienza a ver cosas que se mueven, bólidos, meteoritos, y está en uno buscarle la explicación de que es lo que vi, conformarse con que no sé lo que es que puede ser algo natural o artificial o creer que fue algo extraterrestre. Nosotros, la gente que estamos observando, con telescopio buscamos más la explicación científica”, explica. “Tengo un programa de astronomía en donde ingresas ese punto geográfico, la hora y te dice mira paso tal satélite, hay satélites espía que no tienen una trayectoria, hay gente que se dedica a buscar satélites que no están registrados. Ahora si yo me quedo con que vi una luz y debe haber sido un ovni, está bien lo respeto”.
Consultado sobre la posibilidad de que haya vida en otros planetas, Espinosa dice “es muy probable que sí, pero por ahora por lo menos científicamente no hay ningún dato de que exista o haya existido en otro planeta. Han descubierto meteoritos con material biológico de Marte si en algún momento Marte tuvo vida, creen que si pudo haber habido pero bacteriana. ¿Es vida? Sí, es vida, ¿podemos charlar con una bacteria? No”, ejemplifica.
¿Qué dice el CIAE?
“El Centro de Identificación Aeroespacial es un organismo de interpretación de imágenes y no hace lo que la gente suele llamar "ovnilogía", la cual es, hasta el día de hoy, considerada una pseudociencia. Nuestro trabajo no tiene nada que ver con el "fenómeno ovni" como sinónimo automático de algo extraordinario”, dice a ADNSUR Rubén Lianza, director de este organismo que depende del Ministerio de Defensa de Argentina. El Centro tiene como tarea analizar fotos y videos que envía la gente sobre elementos que son considerados en principio “sospechosos”.
El CIAE publica informes anuales con los resultados de dichas investigaciones y entre el 2016 y el 2021 fueron reportados solo en la Patagonia 29 sucesos. El organismo analizó y determinó que dichos fenómenos correspondían a “satélites, venteo de combustible, insectos y destellos de luces de cámaras fotográficas”, pero en ningún caso OVNIS.
Para Triviño “ellos (CIAE) tratan de negar porque tienen una visión escéptica y creen que lo que nos rodea está hecho por el ser humano o por alguna potencia extranjera. Hay como una negativa oficial. Si el mismo ejército de Estados Unidos está diciendo que algo raro hay los que quedamos medio fuera de contexto somos nosotros al negarlo”, deja la inquietud.
Espinosa adhiere a visión oficial y explica que “hay 2 mil millones de galaxias y cada galaxia puede llegar a tener millones de estrellas, por lo tanto si multiplicas millones de galaxias por millones de estrellas ¿cuál es la probabilidad de que haya vida? Es muy baja. La estrella más cercana que tenemos nosotros – Alpha- está a 4.2 años luz de distancia y la nave más rápida que hemos creado tiene una velocidad de 54 mil kilómetros por hora. Si uno multiplica la cantidad de años luz y la velocidad que puede lograr una nave nuestra, tardaríamos 8 generaciones para llegar a ese planeta y capaz que no hay nada”.
Por otro lado señala que “hay muchísima basura espacial artificial y natural, y muchísimos asteroides, meteoritos, piedritas, polvo espacial que viene de la creación del mismo sistema solar y que está dando vueltas. Todo lo que ponemos en órbita en algún momento termina cayendo y cuando lo hace genera luz. Y cuando eso ocurre y uno está en el campo ve cosas que caen”.
¿Ver para creer?
Lo cierto es que el tema tiene tantos adeptos como detractores. Descubrir que hay vida inteligente más allá de nuestro planea podría ser el evento más transformador en la historia de la humanidad.
“Creo que ellos están acá desde hace mucho tiempo, lo que pasa es que se saben camuflar muy bien. Incluso está la teoría de que pueden tomar forma humana y pueden engañarnos también, las teorías de los Anunnakis y Reptilianos. Creo que los buenos tratarían de darnos una señal para que cambiemos el mundo y los malos que son los que guían a los gobiernos a que hagan todas estas cosas, hacen que el ser humano cada vez sea peor. Estamos en una prueba constante y ese es el tema que toda la ufología sabe que hay extraterrestres buenos y extraterrestres que son no tan buenos”, explica Triviño .